Honey eyes

Vida fuera de Tokyo

Llegue a los Estados Unidos, al bajar del avión me dirigieron hacia una señora, era mi abuela, al fin estaba con ella.
Un señor alto nos esperaba, era un taxi, nos subimos al carro y empezó a conducir.

Al llegar a la casa, abrimos la puerta. La casa era muy hermosa por dentro:

Nos adentramos a la casa, lo cual estaba a la vista el sofá hacía la izquierda y más profundo estaba la cocina.

- Mi niña, has crecido tanto...- Dijo mi abuela haciendo ojos de cachorro.

- Gracias abuela ¿que tal has estado?- pregunte.

- No tan bien, desde que tu madre se fue a Tokyo, no e sabido más nada de ella, hasta que me enteré por tu padre antes de morir - agarro mis mejillas con dulzura.

- Si... mamá... me ah tratado mal, fue una persona que me dejó sola por un Hombre-

- Lo siento tanto mi niña... te mereces algo mucho mejor - al decir eso me dejó mi dijo- vamos a comer algo, ¿que te apetece? -

- Quiero Yakisoba profavor-

- ¿Que es eso Tn?-

- Por suerte traje un poco de esa comida para preparar-

Saque un paquete de Yakisoba y la mostré, empezamos a cocinar, la enseñaba como se hacía y ella me ayudaba en algunas cosas.
Terminamos de hacer la comida, olía riquísimo, nos sentamos en la mesa y comimos.

Paso unos minutos luego de que comimos todo, ella me llevó a mi habitación, era muy espacioso y bonito... muy yo:

Me aliste y me prepare para dormirme, ya que estaba muy cansada.
Me arrope y use mi computadora para entrar al juego en el que Baji y yo jugar. Al entrar al juego me puse mis audífonos y todos estaban hablando en el servidor, un personaje se me acerca y me habla.

- Hola Tn!!!- Dijo Chifuyu.

- Hola Fuyu! ¿Que haces?-

- Juego en línea con Baji-

Era una gran coincidencia lo que estaba sucediendo.

- CHUFUYUU!!! DAME MI DINERO!- Grito, al escuchar su voz, me di cuanta de que era Baji.

- Callate, mira quien esta en el servidor-

- Tn!? ¡¿Nuestra Tn?! -

- Hola Baji- salude tímida.

- Tn! Ya te seguí en el juego, ¿que tal estás Tn?-

- Bien! Todo bien ¿y ustedes?-

- Todo bien- respondieron los dos al unísono.

- Que bueno chicos ¿que tal si cambiamos números? -

- Bien!- dijeron los dos.

Nos intercambiamos números de celular para mensajear, ya que hace tanto no nos vemos y ya los extrañaba.

Pasamos tiempo jugando, platicando y riendo, disfrutando de todo el juego.
Llego la hora de salirme y me despedí de los chicos. Quien sabe cuando volveríamos a hablar.

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HOLAAAA PERSON POR EL CAP CORTO, EL PROXIMO SERA MAS ECTENSOOOOOOO.