La Última

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Miguel: pero entonces... donde vives?
Aitana: pues... ni yo misma lo sé... en la calle... no tengo dinero, no tengo nada, he intentado buscar trabajo, pero nadie quiere contratar a una niña de 16 años, y menos embarazada
Miguel: lo siento muchísimo, de verdad... me encantaría poder hacer algo por ti... si quieres te invito a cenar
Aitana: no, no, no te preocupes... no quiero molestarte
Miguel: no es ninguna molestia, de verdad... Es más, quiero proponerte algo
Aitana: algo? Algo de que?
Miguel: verás, como ya te he contado, ahora mismo estoy viviendo solo con Diego, y con mi madre, pero ella tiene cáncer... Yo... trabajo todo el día, y tengo que dejarles solos en casa... Me da miedo que un día pase algo y yo no esté... Que te parecería venirte a vivir conmigo? Así les harías compañía mientras yo no estoy, y evidentemente te pagaría un sueldo
Aitana: no sé Miguel... es que... me sabe mal...
Miguel: mal? porque?
Aitana: pues porque encima de llevarme a vivir a tu casa quieres pagarme
Miguel: bueno, es que sería como un trabajo... yo necesito a alguien para que esté con ellos mientras trabajo, y tú necesitas el trabajo
Aitana: sí, yo necesito el trabajo, pero... mira, hacemos algo... acepto, pero sólo por irme a vivir a tu casa, no necesito que me pagues nada si ya voy a tener un techo y comida
Miguel: bueno, está bien, pero si necesitas dinero para algo puedes pedirme cuando sea