0 1 6

447 54 2
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.










Jin

Nuestro segunda entrevista en un show nocturno ya estaba comenzando muy diferente a la primera. Para empezar, no me estaba escondiendo en el baño teniendo un ataque de pánico. Por otra parte, Jimin estaba demostrando ser el contrario de Brian, de la mejor manera.

—¿Están bien, chicos? —Jimin me dio un vodka con soda y luego revisó su reloj, un enorme número iridiscente con un arco iris que cambiaba de color cuando captaba la luz—. Deberían venir a buscarlos en cualquier momento.

—Gracias, Jimin —dijo Vante, levantando su copa en dirección a nuestro nuevo manager. Estábamos todos cómodamente en la sala verde de Jaime Jones, con bebidas en la mano, una mesa de aperitivos cerca, y el anfitrión en una mega-TV haciendo su monólogo para la audiencia en vivo. Cualquier nerviosismo que sentía se mantenía a fuego lento, sobre todo debido al hombre a mi lado, que se sentaba lo suficientemente cerca como para tocarlo, con el brazo estirado detrás de mí. El sólo hecho de tenerlo cerca me hizo pensar en él y en cualquier pregunta que se nos pudiera plantear esta noche.

—Recuerda, quieres hablar del álbum, la gira, la dinámica de la banda. Luego puedes hablar de la publicación de Rolling Stone y de la relación RM/Jin, pero... —Jimin nos miró a RM y a mí— ...si va a algún lugar con el que no se sientan cómodos, desvíense. Esta noche se trata de vender el álbum, vender entradas, venderlos a ustedes como banda.

—Entendido —dije, y los demás asintieron mientras el director de escena miraba dentro.

—Estamos listos para ustedes —dijo.

Hubo un rápido descenso de bebidas cuando todos nos pusimos de pie, y cuando nos dirigimos hacia la puerta, Jimin nos dio a cada uno de nosotros una inspección minuciosa.

—Suga, impecable... J-hope, sube el cierre. Vante, te ves bien. — Jimin se detuvo para quitar una pelusa del brazo de la chaqueta de Vante—. Ah, RM, tal vez baja la sonrisa al cincuenta por ciento. Ya sabemos que tu polla es enorme. Jin, déjame verte. —Los ojos de Jimin estaban evaluando, impersonales en una especie de negocio. Él enderezó el cuello de mi camisa y metió las solapas debajo de la chaqueta antes de asentir—. Asegúrate de sonreír. Cuando sonríes, el mundo entero se enamora.

—Oí eso —dijo RM, donde me esperaba en la puerta.

La boca de Jimin se levantó.

—Buena suerte ahí fuera.

Cuando me uní a los demás, respiré hondo, y mientras lo dejaba salir, RM rizó sus dedos alrededor de los míos. No parecía importarle en lo más mínimo la gente que se movía entre bastidores, nos colocaban micrófonos y nos pintaban la cara con polvo de última hora. Le apreté la mano y sonreí cuando miró hacia mí, y maldijo.

—El maldito Jimin tiene razón. Sonríe y todos se enamoran.

—Estoy seguro que sólo me importa que una persona se enamore de mí.

天使³ [ NamJin ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora