✯✯ ESPINAS DE AMOR ✯✯ ✧⁠ SANZU X RINDOU ✧⁠

✯ Capítulo 10 ✯

Mientras la noche de hacia presente, Sanzu salió a tomar unos tragos con Taiju para así darle su espacio al rubio y hacer que el haitani le convenciera.

Para el Haitani era mejor no meterse pero mientras daba un paseo por la casa y ver a Inupi en la terraza bajo la leve lluvia no tuvo más opción que ir -. No tenía idea de que el señor Kokonoi y tú tuvieran una relación - dijo Rindou acercandose al rubio.

Inupi sonrió levemente pero sin hacer contacto visual -. Y yo no tenía idea de que conocieras a koko -

-. Bueno, han pasado muchas cosas, muchas cosas..  - Respondio el Haitani

El rubio solo se aferro a su ropa, levemente bajo la vista notando como el Haitani lucía más libre que cuando visitaba la universidad, antes de que pudiera decir algo se vio interrumpido por el pequeño que corría hacia el Haitani -. Papá, me lees un cuento - mencionaba el niño.

Rindou sonrió y lo cargo -. Por supuesto, pero antes debo terminar una conversación, ¿Si? - el niño asintio y fue bajado para que fuera a su habitación -. Si papá! Te espero! - gritaba juro subiendo a su habitación.

-. ¿Pareces feliz? - hablo inupi

El Haitani solo sonrió algo nervioso, claro que era feliz, obviamente habia días malos, dias peores y todo eso, pero de una forma u otra está familia algo peculiar siempre salía a flote -. ¿Tú crees? -

Inupi suspiro mirandole de frente directamente -. Siempre que ibas a clases te asilabas, nunca entraste a un club, no tenías amigos y tenías la mirada perdida... Pero ahora parece diferente, tienes un brillo especial en tus ojos - dijo con una leve sonrisa -. ¿Acaso estás enamorado de Sanzu? O ¿Realmente quieres ser el padre del niño?  -

A tales palabras el Haitani se puso nervioso, recuerdos de todos los días y en especial del beso del día anterior invadieron su mente, obviamente sentía algo por él, pero no sabía si debía decirle "Amor"y en cuanto al niño, ni el lo entendía solo sabía que debía proteger esa sonrisa inocente .

Inupi solo vio un leve sonrojo en las mejillas de Rindou -. No necesitas responderme... Pero debes saber una cosa - caminando hacia el interior de la casa inupi suspiro notando el anillo que lo unia a Koko -. Si te quedas a su lado, solo te espera una vida llena de dolor y sufrimiento... Lo mismo para el niño... - Con una leve sonrisa Inupi abrió la puerta principal -. La vida en este bajo mundo de delincuentes, no está garantizada, menos a lado de un drogadicto, recuerda a tu hermano - dijo finalmente para salir.

Rindou solo se quedó en silencio, una presión en su pecho se hizo presente, ¿Cómo se permitía ser feliz si su hermano había fallecido?, ¿Cómo pudo siquiera pensarlo? Esas preguntas comenzaron a girar en su mente, mientras seguía pensando su cuerpo no lo dejo y fue directo a la habitación del pequeño Kuro, quien solo esperaba con una sonrisa.

Al ver la sonrisa del niño no pudo evitar sonreír y entrar, realmente no pensaba en que fueran una "Familia de verdad" pero de que ese pequeño se había robado su corazón y se había convertido en alguien importante para él, se había convertido.

Mientras leía el cuento y apreciaba cómo este cerraba sus ojos quedando dormido, su mente seguía en shock, las palabras del rubio habían invadido su mente a tal grado de no dejarle descansar.

Por su parte Sanzu había regresado antes y había escuchado todo lo sucedido, su pecho también sentía una presión que apretaba su corazón, realmente no tenía intenciones de herir a Rindou ni al niño, pero sabía que no podría controlarse y que tarde o temprano terminaría dañandolos.