A veces me pregunto que somos, que nos hace diferentes pero iguales. Siempre oí que sufrimos igual y amamos igual pero es un error pensar de esa manera, si fuera así,por qué cuesta tanto amarnos a nosotros y a los demás? Por qué la confianza no es un derecho si no una recompensa? Me pregunto cuántas veces habré muerto, tantas escenas que repetí infinidad de veces, ahorcado, intoxicado, sobredosis, salto al vacío, empalado, accidente de tráfico, anafilaxia, desangrado, ahogado... Encontre el horror de vivir en una belleza diaria, pensamientos que se sucedían sin pensar, que me asaltaban aún riendo dándome miedo y calma, en los días agitados, llenos de angustia sofocante, asfixiante, donde ves sin ver, daba la paz que necesitaba. Me pregunto también cuántas veces habré matado y torturado, cuántas uñas arranque, cuantos brazos y piernas mutile, si se recompondrian después de arrancarles la dentadura, si volverían a ver después de clavarles alfileres al rojo vivo de la ira en los ojos, una sensación excitantemente tenebrosa y macabra, sensaciones que me aterran y me dan placer a partes iguales. Si sufrimos igual, si somos humanos e iguales, porque mi dolor se manifiesta diferente al tuyo, porque es tan irascible la mente, porque no perturba mi corazón el hecho de imaginar escenas donde puedo sesgar vidas, porque es imaginación? Por qué son meros pensamientos? Por qué es ficticio? Si así es,por qué no hay más gente que piense igual? Hablamos de amar sin condiciones, de una utopía relacional cuando la realidad es tan alejada, siempre amamos a toda velocidad el primer tiempo, en el descanso se suceden las discusiones, las mentiras,los engaños, la rutina, la realidad, el querer cambiar, algunos entran en bucle en esta fase y repiten en un ciclo eterno estos tiempos creándose una ambrosía de la que no pueden escapar porque no saben cómo desintoxicarse así como un drogadicto no sabe cómo dejar aquello que le da aliento a seguir respirando un día más. Otros se sobreponen y usan el descanso para planear el segundo tiempo, para arreglar los fallos del primero y conseguir la victoria abrumadora contra la vida, pero ella, sabía intangible que poco a poco nos tortura hasta la muerte, sabe cómo guiarnos sin darnos cuenta, como manipularnos aún sin creer en ella, si así lo decide terminará ganando. La condición de victoria es la improvisación, sobreponerse a ella y sus trucos, saber dónde está la magia aunque intente distraernos el escenario principal que nos preparó, pero hay algo aún que decide, por encima de todo, nuestra victoria, la aceptación. Porque en este juego de tiempos hay quien apuesta solo y quien lo hace acompañado, pero a pesar que de que parezca fácil, la aceptación es el mayor problema de los humanos. No aceptamos otras razas, no aceptamos que somos animales y por ende igual al mundo, no aceptamos nuestros problemas, no aceptamos ayuda, no aceptamos a nuestra pareja. Aceptarían a su pareja si les dijera que le gusta la zoofilia? O le verían como una abominación de la vida? Aceptarían a su amigo si les contará que le gusta la coprofilia? Les parecía un bicho raro? Y si de repente su padre o madre les dijera que es de otro sexo? O sexualidad? Si les dijeran que son adoptados? O viniera un familiar cuando no habéis tenido familia? En estas situaciones hipotéticas,qué haríais? Es complicado aceptar a una persona pues tenemos caras que no mostramos al mundo por miedo al rechazo, caras que ocultamos a nuestra gente más querida, por eso las ocultamos. Otras son sentimientos que no aceptamos, situaciones que no comprendemos y nos enfurece lo que nos provoca el rechazo, pero alguna vez habéis pensado que pasaría con un es genial? Si alguien os dijera que soy coprofilico, en vez de el rechazo y el asco que provocaría en la mayoría de la gente, aceptar que eso existe y como animales con capacidad de raciocinio es normal que alguien tenga esa filia porque no deja de ser quien conocemos aunque no se comparta ni afecta a nuestro ritmo, si un día después de 30 años,vuestro padre o madre os dice que es del colectivo lgtbi, en vez de preguntar porque, como es posible, porque ahora, que pasaría si dijerais enhorabuena papa/mamá porque podrás quitar cadenas que te pusiste en su día, y así con miles y miles de situaciones. Si simplemente aceptaramos a las personas en su totalidad no es que el mundo fuera mejor pero sería más fácil una convivencia, habría menos suicidios, menos bullying, menos familias se romperían y menos amistades desaparecerían,menos inseguridades tendríamos y más confianza en nosotros nos otorgariamos. Es la clave de una vida, hay pensamientos que no son aptos para esta sociedad pero los acepto y acepto a las personas que me rodean porque no cambia quien soy ni quienes son, aún con angustia de poder perder un día la cabeza y levantar la mirada en un mar de sangre o en un calor abrasador, se debe seguir con la convicción de que un día ganarás y que más de una vez lo hiciste sin darte cuenta.