05, En Todas Las Portadas

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TERCERA PERSONA
En el bufete, dos días después

"Oiga, ¿capturaron a Camilo Borrero en una Iglesia?" Nicolás le pregunta a Pablo en voz alta, mientras todos en la sala de juntas leen las noticias del periódico sobre el tema.

"Y eso no es todo." Pablo dice.

"Pero ¿como así? ¿Entraron en medio de la ceremonia, lo esposaron y se lo llevaron?" Iván pregunta.

"Así es." Pablo confirma.

"No lo puedo creer." Iván dice sorprendido.

"Me muero de ganas por saber." Catalina dice entrando a la sala de juntas juntos a María del Pilar y Elías.

"Yo quiero ver ese periódico porque no he podido leerlo ni siquiera. ¿Alguien me lo puede prestar, por favor?" María del Pilar pregunta, sentandose en su silla.

Pablo le da su copia a Catalina y ella la muestra a María del Pilar.

"Una mujer murió a golpes." Duperly dice.

"Ay no, que horror. Me dió escofríos y todo." Catalina dice un poco disgustada.

"Y está bien, Borrero puede ser todo lo arrogante y detestable que queramos, aceptémoslo. Pero ¿un asesino de este estilo? Olvídenlo." Duperly les dice a sus compañeros.

"Estoy de acuerdo con Alfredo." Catalina dice.

"¿Y usted cuando no está de acuerdo con Alfredo?" María del Pilar le pregunta a su compañera, susurrando.

"Pregunta, pregunta, Alfredo, entonces según usted, ¿qué tipo de estilo de asesinato le queda bien a Borrero?" Elías bromea con su colega penalista, provocando que sus colegas se molesten un poco por hacer un chiste con una situación tan séria.

"Para mí eso parece ser un homicidio accidental." Alfredo dice.

"Señores, no es si no que nos den buen motivo y todos seremos asesinos." Nicolás dice.

"Usted. Yo no." Duperly bromea con su amigo y compañero.

"La verdad yo sí creo que Nicolás podría ser un asesino." María del Pilar dice, provocandolo y todos se ríen.

"A ver, denme una razón por la cual usted mataría a una de estas señoritas que trabajan como stripper en su despedida de soltero." Duperly les pregunta a todos.

"Si la mató, la conocía. Una persona normal no asesina a otra si no tiene un motivo suficiente. Y ese no es el caso." Nicolás dice, levantandose y yendo hacia su amigo Duperly. "Para matar a alguien, uno tiene que tener... cierto miedo de esa persona."

"Porque la conoce." Duperly dice.

"Así es." Nicolás afirma.

"O conocía a la persona, o si no la conoce, sería un asesinato en legítima defensa. Y en ese caso, uno no huye. Y mucho menos si uno es abogado." Alfredo argumenta.

"Pregunta," Elías vuelve a decir, "¿Y Borrero se alcanzó a casar?"

"No." Pablo responde.

"¿Está de buenas el tipo, no?" Iván dice, leyendo el periódico.

"¡Ay que injusticia, de verdad!" María del Pilar dice.

"¿Porqué?" Catalina le pregunta.

"Depende de las pruebas que uno tenga, ¿no?" Nicolás dice.

"No, que injusticia que a mi nunca me invitaron a un matrimonio así. A todos los que voy, terminan igual de predecibles, terminan casados." María del Pilar dice frustrada y todos se ríen.

LA LEY DEL CORAZÓN, pablo domínguezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora