Capítulo 12

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Aquí no va nada"

Clarke, con un fuerte suspiro mezclado con un gemido, se sienta y se levanta de la cama. Ella da pequeños y tentativos pasos hacia el armario y el cuello que se encuentra en la parte superior. Con cada paso que da, más pesados se sienten sus hombros. Ella no quiere ponerse el collar, principalmente debido a la terquedad, pero sabe que lo necesita. No solo para ella.

Clarke sigue acercándose hasta que su pie choca con el armario. Cuando está cerca, mira hacia abajo al collar ofensivo y lo toma. "Más vale que te sientas bien", susurra Clarke. Le lleva un minuto ponerse el collar, ya que no puede encontrar cómo se abre. "¿Quién hizo esto?", se pregunta, con la mano corriendo por las costuras. Ella sabe que quienquiera que lo hizo, tuvo cuidado y precisión al hacerlo. ¿Tienen un fabricante de collares profesional?

Clarke no se detiene en el tema mientras se acerca a un espejo y frunce el ceño. "Yo no... No me veo tan mal", susurra y se vuelve en el espejo. "No demasiado notable" ¡Detente! ¡Es un collar!

Ella sacude la cabeza, murmurando un rápido "no" antes de alejarse. Ahora que ha comido y se ha puesto el collar, tiene una última cosa que hacer.

Espera.


Lexa sube el último escalón hasta el último piso de la torre. Una vez que se levanta, mira a Anya y dice: "¿Cómo nos encuentra?"

Anya se encoge de hombros. Ella mira perezosamente a Lexa, sus ojos parecen distantes y en otro lugar. El Alfa nunca tiene un interés real en las conversaciones sobre Luna. El Alfa es confuso, en más de un sentido. Cada vez que trata de entenderla, siempre se queda con un molesto dolor de cabeza.

"Como, ella está en todas partes"

"Sí", Asiente Anya, "esa es Luna". Pasa por Lexa, encogiéndose de hombros mientras pasa, y se acerca a la puerta de la habitación de "Clarke". Tirando de una llave aparentemente de la nada, abre la puerta y la abre. Lo primero que los dos Alphas notan es que no hay feromonas enojadas, no se murmuran maldiciones, y el sonido de la tela rasgada no se escucha por ninguna parte. Algo está mal.

Anya interviene, "Clarke-", sin querer, Anya se corta a sí misma.

Frente a los dos Alfas, Clarke se encuentra pacientemente. Pasa de jugar con la parte inferior de su camiseta sin mangas a poner las manos detrás de la espalda. Luego se aprieta los labios y se balancea de un lado a otro sobre sus talones. Durante segundos, nadie dice nada, así que Clarke levanta la vista, su mirada se centra en sus dos Alfas.

Ambos Alpha miran el cuello de Clarke, notando el collar muy notable que lleva puesto. Cuando Anya ve esto, levanta una ceja en cuestión. "Te lo pones"

Clarke asente con la vista, "sí" Ella deja de balancerse y mira al Alfa a los ojos, "Quiero salir"

Lexa finalmente se reúne y entra en la habitación. "Podemos ver eso", dice. Ella extiende la mano y cierra la puerta. Tan pronto como la puerta se cierra, Lexa se mueve hacia Clarke. Se toca el hombro, haciéndole saber a la rubia que tiene la intención de tocarla.

Clarke la mira, pero cualquiera de los dos, se queda quieta y no gruñe.

Lexa se mueve detrás de ella, su mano deslizándose por su hombro hasta el centro de su espalda. Ella dibuja pequeños círculos en su espalda. Mientras hace esto, Lexa se inclina y susurra: "te queda bien"

Clarke no le responde. En cambio, mira hacia otro lado de Lexa y hacia Anya solo para darse cuenta de que el Alfa se ha ido. Donde, Clarke mira a su alrededor, sin encontrar a Anya. Se congela, sintiendo un escalofrío que la atraviesa cuando Lexa se muerde el lóbulo de la oreja. Durante unos segundos, el Alfa muerde antes de soltarlo y calmar el dolor con un beso.

Tú, yo y ella (contra el mundo)  [The 100] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora