Tú, yo y ella (contra el mundo) [The 100]

Capítulo 13

control

Si, en alguna situación aleatoria, se le preguntara a Murphy "qué palabra usarías para describir todo", esa es la única palabra que usaría. No tendría que pensar en ello, no dudaría ni tartamudearía. Su respuesta sería corta, nítida y directa al grano. Y, por encima de todo, sería honesto.

Ha vivido durante 19 años y durante esos 19 años ha sido controlado y no sabe nada más que control. Tan pronto como nació en el Arca, fue controlado. Sus padres controlaban dónde podía caminar en sus viviendas. Ellos regulaban cuándo y dónde comía, qué juguetes usaría y qué palabras se le permitía usar.

A medida que crecía, el Arca comenzó a controlar su vida tan pronto como fue encerrado por hacer lo que pensaba que era lo correcto. Controlaron el nivel de oxígeno en su cárcel y en algunos puntos, debido a su loca necesidad de control, sintió que se estaba asfixiando en las cuatro paredes grises y estériles de su celda. Controlaban quién vivía y quién moriría en el vacío vacío del espacio. Determinaron quién era digno de una segunda oportunidad y quién no merecía la primera oportunidad.

Querían el control y lo tenían. Quiere el control y no tiene nada.

Lo que Murphy encuentra... "irónico" es que todos los que lo han controlado eran alfas. Su padre, los guardias, Abby y ahora Gustus. Tal vez, no es la gente con la que está enfadado. Tal vez, su ira esté dirigida a todos los Alfas del mundo, ya que sabe que en algún momento le harán daño.

Si quieren controlar, tienen que ganarlo como Murphy se lo ha ganado todo en su vida. Hay muy pocas cosas de las que está seguro, pero está seguro de que Gustus está seguro de que no se ganó el control sobre él y, cómo van las cosas, nunca lo conseguirá.

"Murphy", suspira Gustus, "No quiero pelear"

"Entonces cállate"

El hombre corpulento suspira de nuevo y se frota la parte posterior del cuello. "No quiero ser tu enemigo. Quiero que haya un nosotros, pero eso no puede suceder..."

"¿Si no me pongo el cuello?" Murphy lo mira fijamente: "¡No me voy a poner ese maldito collar!" Se pone de pie y comienza a irrumpir hacia la puerta. "Ponte un collar", se queja, "nunca en mi vida" El Omega sale corriendo de la cabaña, quejándose de lo tontos que son Polis y su gente mientras se aleja. "¡Eres como los idiotas del Arca!", grita por encima de su hombro, sabiendo que Gustus no se queda muy atrás.

"Murphy", intenta decir algo, pero se detiene mientras Murphy sigue caminando.

"¡Que se jodan Gustus!"

Murphy arrastra los pies lejos de la cabaña que se supone que debe llamar a casa y hacia los puestos. Está seguro de que puede gritarle a alguien el tiempo suficiente para que le den algo. Estaba haciendo eso hace unos días, pero Gustus solo tuvo que intervenir y arrastrarlo de vuelta a la cabaña.

Maldito aguafiestas, Murphy pone los ojos en blanco. Luego mira a su alrededor, tratando de encontrar el puesto perfecto para acosar. Nunca encuentra uno mientras sus ojos se fijan en una rubia familiar. Estás fuera, él la mira y ve el cuello negro alrededor de su cuello. Rápido para caer en la sumisión.

Por la razón que sea, ver a Clarke reír con Raven tiene una sensación en el pecho de Murphy que se enciende y arde. Siente una nueva ola de ira sacudir su cuerpo, enviando escalofríos por su columna vertebral. Murphy gruñe y comienza a acercarse a Clarke, "tú", gruñe.

Clarke supo que en el momento en que Murphy se dio cuenta de ella, iba a iniciar una pelea de algún tipo. Ella estaba segura de ello. Cualquiera a su alrededor podía darse cuenta de que eso iba a suceder y ahora, parece que Clarke tenía razón.