Baby

Capítulo V: Lo Sabe

DECLAME: Los personajes aquí mencionados le pertenece a la genial reina del mundo magico: Rowling, yo simplemente uso solamente los nombres de sus personajes para escribir este fic, el cual espero sea de su agrado.

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Hermione sentía que el mundo estaba en su contra. Para empezar, por algún motivo extraño se había quedado dormida, algo totalmente extraño en ella pues solía despertarse incluso mucho más temprano que el resto de sus compañeras de cuarto. Gracias a ello, se había perdido su clase de Runas Antiguas y al ver la hora supo que ya la clase se encontraba bastante avanzada, decidió que iba a ser innecesario que se presentará. Además, no era como si sus profesores se fueran a enojar o algo por el estilo. No por nada era la mejor estudiante de su colegio.

Entró al gran comedor, donde se encontró con que algunos estudiantes de primero o segundo año se encontraban haciendo deberes, quienes levantaron su vista para saludarla. Hermione les devolvió los saludos mientras se dirigía a la mesa de su casa, agradeciendo que hubiera algunos aperitivos livianos en una larga mesa, para aquellos que deseaban tener un desayuno intermedio. Mientras tomaba su zumo de calabaza, pudo observar por el rabillo de su ojo como Daphne Greengrass se acercaba hacia donde ella se encontraba. Eso sí era raro.

— Granger. Veo que la otra vez te divertiste mucho —dijo Daphne, mientras apoyaba su mano en la mesa. Hermione hizo como que no la escuchó y prefirió concentrarse en su desayuno, algo que a Daphne pareció molestarle. —Oye, te he hablado.

—Sí, ¿y?

—Que me gusta que me presten atención cuando estoy hablando.

Hermione tuvo que dejar su desayuno a medio comer para mirarla. Pasó una de sus piernas sobre el banco y la miró con mala cara.

—Bien, tienes mi atención. Dime qué quieres.

Daphne sonrió con superioridad, como si supiera algo que se le pasaba a ella. Busco entre los bolsillos de su túnica y sacó un papel, que dejó apoyado boca abajo de Hermione. Lo tomó entre sus manos y no pudo evitar que sus ojos se abrieran un poco con sorpresa, algo que no pasó desapercibido por la otra fémina.

—Es una foto donde me estoy besando con Draco en el baile ¿y? —dijo Hermione, como quien no quiere la cosa.

—De hecho querida, no quiero entrar en hechos vulgares. Tú sabes que yo lo sé —dijo, mientras le tendía la mano a Hermione— simplemente, hagamos un trato. Yo me encargo de que esto desaparezca, siempre y cuando tú no comentes lo mio con Harry.

Hermione tuvo que dar un suspiro y estrechar su mano con la de Daphne.

—Bien, es un hecho. Pero te advierto algo —dijo Hermione— donde abras la boca, yo también lo haré.

—Hecho.

Daphne se fue por donde vino, no sin antes mandarles una mirada de advertencia a los pocos estudiantes que estaban en el comedor. Hermione dejó de observar y le dio una mirada a su comida. Supo que sería inútil seguir comiendo, tenía pinta de estar fría. Rememoro aquella vez que la vio junto a Harry en uno de los pasillos de Hogwarts mientras ella hacía una de sus rondas como perfecta. Pensaba que Harry tenía una relación con Ginny pero no era así. No quiso ahondar en los detalles de cómo se habían dado las cosas. Aunque si le tuvieran que pedir el favor de guardar el secreto, ¿el motivo? Pues hasta que Daphne no cumpliera la mayoría de edad, estaba comprometida en matrimonio a Blaise Zabini, el cual se estaba previsto llevar a cabo dos meses después de que la rubia cumpliera la mayoría de edad. Pero para cuando eso pasara, ella ya estaría casada con Harry.