La mañana llegó y el sol alumbró el cadáver del akula que aún seguía tirado en la arena, ningún miembro del clan se atrevía a acercarse al cuerpo apesar de que sabían que estaba muerto.
La casa de curación se mantenía siempre vigilada por los guerreros omatikaya que habían venido a ayudarlos, eran pocos los que tenían permiso de ingresar al lugar.
Dentro del Mauri se mantenía dormida toda la familia Sully en compañía de los hermanos metkayina y el joven Roxto, la noche fue larga y difícil ya que Neteyam tuvo altas temperaturas lo que provocaba que se moviera a causa del dolor y abriera ligeramente las heridas en su cuerpo, todos lograron ayudarlo a mejorar y ahora se encontraba durmiendo plácidamente.
Aonung empezó a despertarse lentamente, encontrándose con el rostro dormido de su amado, al principio se asombro al verlo ya que significaba que habían dormido juntos pero luego los recuerdos del día anterior lo hicieron despertar por completo.
Sus ojos ahora miraban con tristeza el rostro pálido de su amado, levantó su mano y acaricio suavemente la mejilla de Neteyam, 'cuanto deseo que tus dorados me miren', pensaba Aonung mientras lo miraba, fue entonces que recordó que debía aplicar medicina en las heridas de Neteyam y volver a cubrir las mismas para que sanarán más rápido.
Con su misión en mente se levantó cuidadosamente, miro a su alrededor y encontró a todos durmiendo en un lado del mauri, el señor Jake tenía a su hija tuk y a su esposa durmiendo sobre su pecho, kiri se acurrucó en el brazo de Roxto y su hermana dormía tranquila en los brazos de Lo'ak, todos se veían muy cansados, después de todo lo que pasaron definitivamente merecían dormir.
Sus pasos sigilosos lo llevaron a los estantes donde se encontraba la medicina y con mucho cuidado tomo los medicamentos, ungüentos y telas limpias que su madre le indico, con todo listo regreso al lado de su amado.
Levantó ligeramente el brazo izquierdo de Neteyam y empezó a sacar la tela blanca que lo cubría, al terminar sumergió un pequeño paño en agua y paso está cuidadosamente por la herida, tomo el ungüento y lo aplicó suavemente con sus dedos, asegurándose de que esté bien distribuido por toda la herida, terminando cubrió la herida con telas nuevas y bajo su brazo.
Ahora se venía lo difícil, sus ojos se situaron en el abdomen de Neteyam, la herida era bastante grande por lo que le había comentado su madre, realmente no sabía cómo reaccionaria al verla pero debía ser fuerte ya que era su deber cuidar de su amor.
Con un poco más de valor empezó a sacar la tela que cubría la herida y cuando termino amargas lágrimas empezaron a caer de los ojos del metkayina, la mitad del abdomen de Neteyam tenía cortes profundos, parecía como si pudiera ver los colmillos del akula incrustados en el cuerpo de su amado, aún se sorprendía del aguante y tenacidad de su Neteyam, con una herida como está cualquier navi hubiera muerto, 'muchas gracias Eywa por mantener a mi amor a mi lado'.
Cuando sus lágrimas dejaron de caer volvió a sumergir el paño en agua y limpio con mucho más cuidado el abdomen de su amado, al terminar aplicó el ungüento y cubrió la herida, miro por un segundo el abdomen de su amor, admirando cómo este subía y bajaba indicando que estaba vivo, su cuerpo se inclino y beso las heridas tratando de que esto sirviera como remedio para calmar al menos un poco su dolor.
Tomo las cosas que utilizo y las regreso a su lugar, cambio el agua del cuenco dónde sumergió el paño y con agua limpia se acercó de nuevo a Neteyam, limpio poco a poco su cuerpo, con suaves caricias removía algunos restos de sangre seca y sudor que quedaban, sentía que eso lo haría sentir más cómodo.
Al terminar tomo una tela y tapo la mitad del cuerpo de su amor, un suave bostezo salió de sus labios ya que aún su cuerpo tenía rastros de sueño así que decidió volver a acostarse al lado de Neteyam, su cuerpo se acurrucó suavemente en el lado derecho del cuerpo del omatikaya, tomo entre sus manos la gran mano de su amado y sintió que está estaba más caliente, una sonrisa aliviada surco su rostro, 'pronto despertara y me dará una de esas hermosas sonrisas', con eso en mente cerro sus ojos.
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El Azul más Hermoso
RomanceNeteyam y su familia deciden ayudar al clan metkayina puesto que están cazando a sus hermanos tulkun, el joven no sabe que al llegar su corazón empezará a latir desenfrenado por el hijo del Olo'ektan Tonowari. Rashos es la primera vez que escribo...