Neteyam tomo firmemente las riendas de Niot mientras que de sus labios salieron un par de chasquidos, las alas de Niot se abrieron y en un ligero movimiento ya estaban en el aire.
Miro a Aonung el cual tenía los ojos fuertemente cerrados, había movido su cabeza a un lado, mientras que sus manos sostenían firmemente la montura del ikran, una sonrisa se formó en sus labios al ver al joven metkayina.
La mano derecha de Neteyam solto la rienda y se acercó a las manos de Aonung, quería que viera la maravillosa vista y que obviamente tuviera un buen recuerdo de su primera vez volando, cuando poso su mano sobre las manos de Aonung el metkayina dio un pequeño brinco, insitado por la acción decidió hablar
"Aonung, estás bien? Me gustaría que abrieras tus ojos, se supone que eres mi guía así que dime a dónde debo dirigirme" soltó Neteyam muy cerca de la oreja del metkayina
Aonung no podía creer lo cerca que sentía a Neteyam, tenía miedo era obvio pero al mismo tiempo no podía dejar de pensar en el joven detrás de él, así que después de escuchar a Neteyam respiro hondo y abrió lentamente los ojos, sus labios se abrieron en sorpresa al ver la hermosa vista frente a el, todo se veía diferente, todo se veía más mágico.
Inconcientemente Aonung se acomodo cerca del pecho de Neteyam para poder apreciar mejor la espectacular vista frente a el, miraba el océano el cual parecía brillar, nunca había visto al océano tan hermoso como en ese momento apesar de haber vivido en el toda su vida, y luego el bosque, podía ver los frondosos árboles y también los estanques con flores de colores, todo era tan hermoso.
Neteyam no sabía que hacer, sentía el hombro y brazo derecho de Aonung sobre su pecho, podía sentir su fría y suave piel y también pudo sentir su suave cabello ya que algunos de sus rulos tocaban su rostro por el viento, luego su vista se poso en los ojos iluminados de Aonung, los cuales brillaban tan intensos como las flores del árbol de la voces, y su sonrisa, Oh Eywa, esa sonrisa le quitó el aliento, quería observarlo un poco más pero esos dos hermosos destellos lo miraron a el
"Neteyam vamos más cerca de mi clan, quiero mirar mi hogar desde esta altura" hablo un muy feliz Aonung
Sin pensarlo hice caso a su petición y recorrimos el clan, el miraba tan emocionado todo a su alrededor, me empezó a señalar algunos lugares como la casa de curación, el Mauri dónde guardaban las redes y lanzas, también me señaló su propio Mauri y por último sobrevole el Mauri que era el hogar temporal de mi familia.
Estaba tan feliz de que Aonung estuviera tan emocionado volando conmigo que olvide por completo el motivo por el cual íbamos a volar originalmente, eso realmente ya no me importaba yo solo quería seguir mirando la sonrisa de Aonung y más que todo yo quería ser el causante de su bella sonrisa.
"Neteyam, ese de ahí no es tu hermano" la voz de Aonung me saco de mis pensamientos, mire en la dirección que el me señalaba y me di cuenta de que si era Lo'ak, el miraba fijamente hacia nuestra dirección, algo extrañado vi que Lo'ak alzo los brazos y me hizo unas señas "hermano, la cena" fue lo que me dijo y ahí me di cuenta de lo tarde que era y de la promesa que le hice a mi madre y hermanas.
No podia creer que olvide por completo la cena, no tenía tiempo de regresar al bosque y dejar a Niot así que regrese a mi Mauri y empecé a descender, Aonung me miraba raro así que decidí hablar
"Olvide la cena, se supone que llegaría después de mi ronda nocturna y lo olvide por completo" dije apenado
Aonung abrió aún más sus ojos, ahí me di cuenta que el también lo había olvidado "Ay por Eywa, se suponía que yo tenía que darles la bienvenida junto con mi padre y también hacer una danza" exclamó preocupado Aonung
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El Azul más Hermoso
RomanceNeteyam y su familia deciden ayudar al clan metkayina puesto que están cazando a sus hermanos tulkun, el joven no sabe que al llegar su corazón empezará a latir desenfrenado por el hijo del Olo'ektan Tonowari. Rashos es la primera vez que escribo...