Desenlace.

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Su cuerpo ardía al igual que su interior, despertó desorientado ¿que había pasado?
Miró su alrededor y se dió cuenta que estaba acostado en el colchón del ático.

Será mejor que baje a hacer el desayuno.

Se destapó y notó que estaba desnudo.

Sl: ¿que mierda me sucedió?

Recordó lo último que vio antes de desmayarse.

La tétrica sonrisa de su hermano.

Oh mierda.

Se acercó a la compuerta y trató de abrirla pero no podía ya que estaba con candado.
Quiso sacar sus tentáculos pero no podía, se sentía debil y pequeño.

Sl: ¡OFFENDERMAN!

Gritó con enojo.
En cuestión de segundos offenderman apareció.

Of: ¡cállate!

Subió enojado y golpeó a su hermano en la cara.
Slenderman trató de responderle pero offenderman lo inmovilizo.

Habían pasado unos dos minutos y offenderman seguia golpeándolo.
El menor tenia la mejilla roja y su ceja estaba partida.
Lloraba en silencio,
se sentía tan inutil...
Offenderman se detuvo y miró con desprecio a su hermano.

Of: si vuelves a gritar te irá peor.

Se estiró su gabardina y se acercó a la compuerta.
Slenderman tenia tercianas del dolor.

Sl: ¿p-por qué?

Susurró.
Offenderman lo miró.

Of: ¿por que no?

Sonrió y bajó del ático mientras slenderman lo seguía con la mirada.

Slenderman miró el techo mientras tocaba su rostro con delicadeza.

¿Por qué yo?
¿Que le hice?

Cerró sus ojos y trató dormir. Las horas pasaron y ya había oscurecido. Se despertó y sintió un horrible dolor que recorría todo su cuerpo.

Miró a su derecha y vio un plato de frutas al lado de la compuerta.
Se acercó y se lo comió todo.

Pasaron las horas y slenderman tenia sus manos lastimadas de tanto intentar salir de ahi.
Se sentia una escoria.

Tenia muchísima hambre. Trató de dormir para pasar las horas y esperar a que mañana offenderman le de otro plato de comida.
Ya era un nuevo día, la luz entraba con dificultad por las delgadas cortinas y el vidrio polarizado. Se levantó y notó el nuevo plato de comida, se lo comió todo nuevamente.

Sintió ganas de orinar y no sabia que hacer ya que no había ningún excusado, recordó que el ático, antiguamente, era la habitación de sus proxys y portaba un baño el cual había sido tapado por una muralla de madera fina.
Empezó a tocar las paredes para averiguar cual era la que estaba hueca y al pasar los minutos la encontró.
Nuevamente sus manos estaban heridas y llenas de astillas, cuando logró entrar prendió un pequeño foco que colgaba de un cable y orino.
Se preguntaba por qué había clausurado aquel baño e inmediatamente se respondió.
El mismo lo había tapado por que generaba gastos extras y porque no tenían motivo para mantener 5 baños.

Terminó de orinar y volvió a tapar la "puerta" con el trozo de madera.

Miró el ventanal por horas hasta el atardecer.
La compuerta se abrió dando paso a su hermano.
Slenderman lo miró sin moverse.
Se sentía completamente intimidado

A través de la ventana (slenderman x offenderman) Creepypastas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora