Cruzando al mundo ABO

38

Capítulo 38

　　Durante los días siguientes, Shen Shulin los observó coquetear entre sí. Sí, flirteando, ésa era la única palabra que se le ocurría para describir la escena que tenía delante.

　　Como acababa de ocurrir esta mañana, Luo Lingyu tomó la iniciativa de provocar una pelea con Shen Shuqi, y a medida que éste se familiarizaba más y más con sus hábitos de movimiento, y a medida que se sentía más y más cómodo al enfrentarse a ellos, una vez más fue derrotado y obligado a tirarse al suelo.

　　Shen Shuqi le sujetó las muñecas por encima de la cabeza con una mano y le inmovilizó las rodillas con la otra.

　　Shen Shuqi entrecerró ligeramente los ojos, impasible: "¿Y qué si no te suelto?

　　Miró fijamente a Beta desde arriba, como un león que somete a su presa. Luo Ling Yu intenta arquear el cuerpo para liberarse, pero su columna vuelve a su posición original. Intenta torcer la muñeca, pero los dedos de Shen Shuqi son como tenazas de hierro, inamovibles, y las feromonas de Alfa presionan sus glándulas y nervios.

　　Su expresión renuente se posó en los ojos de Shen Shuqi, y no sé qué parte de las cuerdas del corazón de este último se agitaron. De repente, Shen Shuqi sonrió débilmente y se inclinó lentamente para agachar la cabeza. Al ver que sus rostros se acercaban cada vez más, Shen Shulin derribó el jarrón que había sobre la mesa con un movimiento de la mano, y este nuevo jarrón, el "Sueño de los sueños y danza de las mariposas", una pieza de porcelana francesa que costaba 100.000 dólares, cayó sobre la mesa de mármol, golpeando una esquina de la delicada escultura de la mariposa con un claro estrépito.

　　El ruido atrajo naturalmente la atención de dos personas.

　　"Xiaolin, ¿qué ocurre?".

　　Shen Shuqi le devolvió la mirada.

　　"Se me resbaló la mano".

　　Shen Shulin dijo con indiferencia.

　　Luo Lingyu aprovechó la oportunidad para saltar y darle un puñetazo a Shen Shuqi y salir corriendo. Shen Shuqi gruñó y alargó la mano para agarrarle, pero no pudo hacerlo.

　　El dolor contundente seguía en su cuerpo y Shen Shuqi debería haberse sentido desgraciado, pero le pareció divertido, tan divertido que se rió a carcajadas.

　　¿Cuánto tiempo hacía que no veía una sonrisa tan pura en mi hermano? Shen Shulin no pudo evitar sentirse un poco aturdido, "Hermano ...... ¿estás contento?

　　Las palabras ya habían salido de su boca cuando se dio cuenta.

　　Lo primero que tienes que hacer es hacerte una idea de lo que estás haciendo.

　　En el jardín, al otro lado de la ventana, Luo Lingyu estaba jugando a tirar piedras delante del estanque, un juego infantil, pero aquel hombre se estaba divirtiendo e incluso había pedido a sus criadas y jardineros que se unieran a él, sin tener en cuenta su estatus.

　　Shen Shulin le miró y él le miró. Se miraron a los ojos, comprendiendo ambos que Beta había puesto un cebo a Alfa, un cebo que no podía ser rechazado.

　　"Hermano ......" preguntó Shen Shulin en voz baja, "¿Te casarás con él?

　　Aún así hizo la pregunta, lo que más temía.

　　"¿De qué estás hablando?" Shen Shuqi se rió y levantó la mano para rascarse la nariz cariñosamente. Dio un paso adelante y cogió a su hermano gemelo en brazos, acariciando una a una la espalda de Omega como había hecho cuando era niño.