A mi cuidado

Capítulo 10

-¿Y fuiste al médico para que te revisaran eso?-preguntó Minji señalando la muñeca vendada de la rubia

-No realmente, fui yo quien me vende la muñeca-la menor se encogió de hombros mirando de reojo a la castaña, ahora adulta, que seguía durmiendo-además, Bora era más importante que un golpe tonto como este-levantó su mano con la muñeca vendada

-No creo que a Bora le agrade verte con eso y mucho menos le va a gustar que no hayas ido al médico-la mayor también miró en dirección hacia donde estaba su amiga acostada mientras Yoohyeon le realizaba un rápido chequeo-tú más que nadie debes saber lo mucho que se preocupa Bora por tu salud

-Claro que lo se, pero en este momento lo que más importa es que Bora esté bien-se encogió de hombros-mi muñeca puede esperar

Minji tan solo rodó los ojos y soltó un resoplido antes de mirar en dirección a su esposa que al parecer había terminado de chequear a Bora.

-¿Has terminado ya?-le preguntó mirándola mientras se acercaba donde ella y Siyeon estaban

-Si, Bora Unnie despertará dentro de poco-sonrió en dirección a la rubia-por cierto, ella recordará todo lo que sucedió mientras era una niña

-Supongo que tener mi muñeca así no va a ser mi único problema cuando despierte-la rubia suspiró con cansancio

-Me pregunto que tanto presenció la pequeña Bora para que te pongas así-Minji se burló

-Cállate Kim-le dio una mala mirada logrando que la mayor tan solo soltara una carcajada burlándose aun más-idiota

La rubia se levantó de la silla en la que se hallaba sentada y caminó en dirección a Bora, que ya tenía su cuerpo adulto de nuevo, Siyeon quitó su ceño fruncido apenas se topó con el rostro sereno de su esposa.

-He de admitir que extrañaré poder cargarte en mis brazos y llenarte de besos mientras ríes de manera adorable-le acarició la mejilla con suavidad mientras sonreía

-Aun puedes hacerlo-murmuró la castaña aun sin abrir los ojos

-¿Hace cuanto estás despierta?-levantó una ceja expectante, lo único que recibió fue silencio-Bora no me creas tan idiota, sé lo que oí

Silencio.

-Bora-volvió a llamarla, pero no hubo respuesta de nuevo-Bora, respóndeme

-Hasta cuando era una mocosa me llamabas de formas más cariñosas, Lee-la castaña finalmente abrió sus ojos dándole una mirada indignada a la rubia, la cual solo soltó una pequeña risa-no te rías, aun sigo enojada contigo por haber dejado que Miyeon me cargara. Voy a tener que darme un baño apenas salga de aquí-finalmente se sentó en la camilla

-Oh vamos, no podía cargarte para poderme levantar-mostró su muñeca vendada-después de todo solo tenía una mano en la cual apoyarme sin hacerme daño

-¿Cómo...?-la expresión de enojo de la castaña desapareció siendo reemplazada por una de preocupación mientras tomaba con cuidado la mano lastimada de la más alta-fue cuando te caíste por culpa del susto de Miyeon, ¿no?

-Acertaste-le dio un toque en la nariz con el dedo índice de su mano libre

-¿Fuiste al médico a que te revisara?-le preguntó tanteando con cuidado su muñeca

La rubia se mantuvo en silencio mientras desviaba su mirada avergonzada a otro lugar en la habitación.

-Siyeon, fuiste a ver a un médico ¿verdad?-esta vez su tono de voz sonaba reprochable

-En mi defensa tenía que traerte primero, eras más importante que un simple dolor-trató de excusarse

-Dile simple dolor cuando el médico te diga que tienes alguna fractura-la castaña se bajó de un salto de la camilla y tomó de la muñeca buena a la menor-iremos donde un doctor ahora