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¿Qué nos pasó?,¿que cuando estábamos muy bien se complicó?
Eso me pregunto, ¿en verdad le falle?, ¿no satisface sus necesidades?, ¿no fui yo la que estuvo con el cuando estaba solo?, pues al parecer no, yo no fui esa mujer.
Y me duele saber eso, no puedo cambiar el tiempo pero si siento muy culero que no se haya puesto en mi lugar y haber tenido los huevos de decirme que esperaba un hijo.
No me molesta el echo de que haya tenido una amante, me molesta que oculte a su hijo, y me da lastima que la amante permita que niegue a su hijo.
Porque sea o no esposa o amante ese hijo es suyo, de su sangre, y un hijo JAMÁS se niega.
Pensé que Iván era un hombre derecho, que tendría los huevos para decirme toda decisión que el tuviera.
Pero el hubiera no existe, solo me queda el futuro.
Pensé que el sería mi camino.
Que sería mi destinó.
Pero no fue así.
Ahora me encuentro en la calle, tendré una cita conmigo misma, mientras trabajo y hago papeleo.
Iré a el bistró marina, tiene de todo y está buena su comida.
Estaba cantando cuando, veo que dos camionetas polarizadas me siguen.
Supuse que era Iván así que no hice nada, quería escucharlo diciendo su versión y, aclarar mis sentimientos con el.
Obvio que mis sentimientos son decepción, lastima, molestia etcétera.
Entre y me senté en una mesa alejada, en eso entra Iván con sus escoltas, quitaron teléfonos y pagaron cuentas hasta cerrar el restaurante.
Venía sonriente mientras sostenía una hermosa flor negra, se sentó y habló.
-Mi muñequita, la cague, la cague y lo sé pero, yo soy hombre y tengo necesidades que tu no lograste satisfacer.-dice cínico.
No mames, es un pendejo.
-Bueno, ¿es todo lo que tienes que decir? Porque creo que ya acabaste.-dije viéndolo.
-No, solo es el principio.-dijo mirándome imponentemente.
-Eres un descarado y un mierda, pero como yo ya dije, no te pagare con la misma moneda, yo no soy corriente ni mucho menos imprudente para decir de mas ni meterme en tu vida, te deseo la felicidad, de todo corazón, porque yo te amo, pero no eres mío ni quiero que lo seas, pero si te voy a pedir que tengas un poco de seriedad, que al parecer yo pensé que te sobraba y no, es todo lo contrario, te falta, pero bueno, te agradezco por la experiencia y por la camioneta, que si gustas te doy ese dinero, con tal de que a mi me sobra, ah y una cosa, yo pensé que tendrías los huevos de decirme que esperabas un hijo, pero ni eso, otra expectativa que me hiciste creer-dije.
Se puso nervioso pero lo trato de calmar, se levanto y me dejo la rosa que venía en una cajita de cristal.
Me fui de el restaurante tiempo después, y comencé a ir por las calles de Culiacán, a pensar y disfrutar, porque la vida es corta y se vive una sola vez.
