20. Madre

145 20 0
                                    

A mediados de primavera el viento de la mañana jugaba con las hojas de los arboles provocando un sonido que Jung Hee Sook solia disfrutar.

Swoooshhhh~

Por eso le gustaba pasar por el parque despues de venir del trabajo, en el transcurso de ese tiempo trataba de despejar su mente y disfrutar de las pequeñas cosas que ocurrian a su alrededor.

Como la luz que se filtraba a traves de las hojas de los arboles y formaba figuras abstractas en el pasto.

Hee sook esbozó una pequeña sonrisa casi imperceptible.

A lo lejos vio a una niña de vestido azul jugando con aquellas luces junto con un cachorro de golden retriever.

Fue una escena muy linda.

Mientras se disponia abrir la puerta de su casa como de costumbre, antes de entrar, un estruendo repentino la hizo retroceder tres pasos.

Entonces una voz molesta la imterceptó.

"¡Hasta que recuerdas donde esta tu casa!

Una señora salia de SU apartamento con expresion enojada como si siempre hubiera vivido ahi.

Jung Hee sook no era el tipo de persona que le gustara causar problemas.

"¿Como entraste?"

Pero a veces se preguntaba si realmente podrian con ella si alguna vez la obligaban a explotar, porque habia mucho en su interior que llevaba tiempo sin salir a la luz.

No obstante, en estos momentos era mejor guardar la compostura.

Por mucho que en su corazon su sangre hervia por romper algunos huesos a esa persona desvergonzada, su rostro permanecia tranquilo.

Esta mujer era como una cucaracha.

"A quien le importa eso? Pequeña ingrata. Como te atreves a tratar asi a tu madre? No es suficiente todo lo que sacrifique por tu culpa, ahora me negaras unos pocos centavos. Como se supone que sobreviva?"

Madre.

Jung Hee sook queria soltar un risa.

La miró como si observara a un mono en el zoologico.

(Ella fue todo menos eso, incluso puedo decir que sus hijos me darian la razon)

"Si te falta dinero trabaja, tus extremidades funcionan bien. Que hay de tus hijos? Ve a pedirles a ellos dinero"

Al escuchar lo que Hee sook dijo el rostro de ella se desfiguró tornandose blanco y no dudó en lanzar la palma de su mano hacia el rostro de Hee sook.

Paff.

"Mocosa malcriada ¿como te atreves a hablarme asi?

"Crees que si me golpeas te daré dinero? Mejor pideselo a tu nuevo esposo, tu situacion economica no es asunto mio. Cuando fuimos familia? Solo compartiamos techo unos años"

Ella no esquivó el rostro pero la miró directamente a los ojos mientras se relamia una gota de sangre en sus labios con una sonrisa sarcastica.

Ella no tenia idea de cuanto se estaba conteniendo Hee sook, tenia un monton de ganas de echarla a patadas literalmente y no le importaria que fuese mayor que ella.

Pero tambien estaba cansada y solo queria terminar rapido con esto.

Su antigua madrastra se puso rígida y no pudo mirarla aunque de todos modos le gritó.

"Tu padre y yo te educamos y gracias a eso estas donde estas. Que crees que pensaria él cuando me tratas asi? Ahora que tienes dinero ya no piensas en la familia, sin duda estaria decepcionado"

Tal vez estaria decepcionado pero no de mi, pensó.

"Menos mal que no esta vivo para estarlo"

Lo ultimo que pensó lo dijo en voz alta.

"¡¿Como puedes decir eso de tu padre?! ¡Por eso se cansaron de ti! Mereces lo que te pasó, todo fue tu culpa. Si no fuere por ti aun viviria tu-"

"Basta. Ves lo que ahí arriba? Es una cámara si sigues acosandome llamaré a la policia, como sabras, como a cualquier persona, no me gusta que vengan extraños a pedirme dinero. Ahora dejame en paz"

En ese momento Hee sook aprovechó su desconcierto para tirarla hacia afuera de la puerta y entrar ella.

"T-tu...!"

Cuando vió que Hee sook no iba a dar su brazo a torcer y cerraba la puerta detras de ella finalmente se fue maldiciendola.

Cuando al fin logró hecharla Jung Hee sook se deslizo en la pared de espaldas hasta caer al piso.

Mas tarde hablaria con el dueño del apartamento y cambiaria la contraseña, penso mientras soltaba un largo suspiro, ya tenia una idea de como se habia enterado esa señora.

Habia logrado animarse antes de llegar a su apartamento pero ahora solo tenia ganas de dormir. Su cama la estaba llamando a gritos. Se tumbó en sus sabanas y se aferró a su almohada, podria conseguirse un lugar mejor para vivir pero le gustaba la ubicacion de este apartamento, habia una libreria y un parque bonito cerca.

Antes de quedarse dormida echo un vistazo a su habitación, en la mesa de noche habia una foto enmarcada.

Un par de  rostros familiares que le sonreian cálidamente dentro de esas gelidas cuatro paredes.

Estiró su mano para alcanzarla y la llevo cerca de su corazón, su ceño se frunció ligeramente. La comisura de sus ojos le estaban empezando a arder, luego su cuerpo se sintio tan debil y se encogio pensando que tal vez asi desapareceria al fin; cerró los ojos y esperó no despertar.

Su almohada se humedeció un poco despues de eso y poco a poco se quedó dormida.

Al dia siguiente amanecio con los ojos hinchados, con torpes movimientos se arrastró al lavabo para refrescarse la cara. 

Suspiro.

Otro dia para vivir.

Su cuerpo hizo la rutina de forma predeterminada y comenzó a caminar hacia la estación de autobuses.

El aire frio de la mañana congelo sus mejillas.

Ni siquiera recordaba que era lo que habia comido pero al menos era suficiente para que su cuerpo continue vivo.

Mientras subia al autobus le llegó la melodia de notificación en su celular.

"uh?"

Habian actualizado mas capitulos de su novela favorita.

Mientras se sentaba en su asiento recostó su cabeza en el vidrio de la ventana y se puso a leer.

Luego de unos minutos la comisura de sus labios subio un poco, el movimiento fue casi imperceptible pero estaba ahi.

Suspiro.

Sus ojos cansados dejaron de verse muertos y ahora se veian mas tranquilos.

"Supongo que no deberia rendirme tan pronto"

Sus novelas favoritas eran lo unico que tenia.

Ya le habian dicho que era estupido que se aferre a cosas asi. Pero a que mas podia aferrarse? No tenia a nadie y sus razones para vivir habian disminuido una por una los ultimos años.

Hee sook trataba de ver el lado positivo pero era dificil, agotador...

Casi hecha por la borda todo en mas de una ocasion.

Sus familiares querian que se casara de nuevo pero ni siquiera habia pasado mucho tiempo desde aquello, nadie se preguntaba por su opinion antes de empujarla a citas a ciegas o cenas imprevistas. Y sabia que tampoco se la pedirian jamas.

Suspiro

Habia ido a terapia varias veces pero el proceso era lento.

Y en ese transcurso Cale, Raon, Mary, todos... le habian ayudado mas que cualquier persona que se le haya acercado solo por compasion superficial.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 05, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El Joven Escudo De Alas PlateadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora