❝Podría llevarte conmigo a ver todo el cosmos por completo y pasear por el telar de estrellas juntos, Xiao❞
Xiao, un joven científico mitad-Adeptus se ve en él trabajo de cuidar a un chico rubio que cayó del cielo ¿es eso posible?
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Liyue
Xiao sentía mucha, mucha curiosidad por Aether, cada vez que llegaba le hacia un montón de preguntas sobre el hasta que ya no tuviera mas para ser respondidas, preguntaba cosas como el porque su cabello era tan rubio y sus ojos igual, porque sus ojos eran tan brillantes, sus pecas, las leyes universales de las que les había hablado antes, no se habia dado cuenta de lo mucho que esperaba que llegara la noche para poder llegar a su templo y hablar por horas
Los adeptus son seres extremadamente curiosos, sus hermanos le contaron muchas veces los desastres que habían hecho por ese instinto que tenían, por ejemplo una vez, los cuatro fueron uno de los templos antiguos de Morax porque decían que ahí, habían monstruos que Morax había sellado con exorcismos así que fueron, y deshicieron los hechizos para ver si podían derrotarlos, si pudieron. pero quedaron terriblemente heridos y el templo casi destrozado.
Guizhong, ping, la preservadora de nubes los regañaron por horas, hasta que Morax se entero y les preguntó porque lo hicieron y, se empezó a reír a carcajadas cuando estos le dijeron que simplemente no pudieron aguantar la curiosidad de intentarlo, diciendo que lo hicieron con todo el cargo de conciencia posible y que se sentían realmente mal por lo que habían hecho, por eso es que ayudarían a reconstruirlo y aceptarían el castigo de sus acciones.
realmente no hubo un castigo horrible, Morax ni siquiera los regañó de hecho, pero ellos realmente se sintieron muy mal, muy mal, ahora, Xiao tenia un pequeño problema con este instinto y es que en serio había desarrollado mucha curiosidad por el astro, quería saber que tipo de cosas podía hacer o las cosas que hacía mientras el no estaba y lo pensaba todos los días a cada hora, en ese momento, estaba con sus hermanos eliminando monstruos y habían terminado de purgarlos.
Fue una batalla difícil, eran muchos demonios y bastante poderosos, cada vez los monstruos se hacían más difíciles de purgar para todos, él había acabado bastante herido, por lo que ahora estaba reposando con su hermano Bosacius, sentados en una de las rocas del lugar Bosacius lo sostenía con una de sus brazos para que no se fuera de lado y pudiera descansar, sus piernas tenían muchos arañazos que ya habían terminado de sangrar, su ropa también había sufrido bastante.
Bonanus había usado sus habilidades para curarlos, pero las heridas no eran normales porque eran de demonios, así que era mas obvio que serian difíciles de curar, en ese momento también indarias estaba dándole un poco de apoyo emocional a su hermano Menogias, que había batallado bastante en la pelea y fue tanto que su catalizador se rompió de lo contaminado que estaba, sus cuerpos les dolían y esperaban poder descansar, mientras que Bonanus caminaba por los alrededores recogiendo frutas.
⎯⎯ ¿Cuándo fue la última purificación que nos hicimos?⎯⎯ Pregunta indarias realmente adolorida, mientras se saca una astilla del brazo.
⎯⎯creo que fue... después del rito de la linterna del año pasado? oh no...⎯⎯ Dice Menogias recordando.
