Capítulo V

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Subieron a un cuarto y ahora mismo se encontraba uno encima del otro besándose con tanta pasión que les mandaba el corazón.
Félix se encontraba debajo del mayor mientras recorría el cuerpo con sus manos de Seo. Se encontraban aún mojados pero ya se habían conseguido secar, ya que salieron a sentarse en una de las tumbonas que había y descansar uno encima del otro.

El mayor empezó a besar el cuello del más pequeño y el otro sollozaba por el placer que éste le daba. Cegados por el placer y el alcohol, changbin le quito la camiseta de hello Kitty del cuerpo de Félix para empezar a besar todo su torso. Félix tampoco se quedó atrás, le quito aquella camiseta ajustada y pudo ver los bíceps que tanto le volvió loco...

- ¡AAA! - gritó su amigo, parecía que le hubiese pasado la peor cosa de su vida. Jisung miraba a Félix que estaba en un estado de ansiedad, alegría y frustración. Jisung acarició la espalda de su amigo en modo de apoyo.

- Lixxie, no me has dicho lo que te pasa así que no puedo ayudar mucho - explicó intentando ser flexible, el contrario no tenía buena cara.

- Jisung la he cagado más que la vez en la que grabé al profesor de Lengua duchándose - dijo con desespero. Si había hecho esa acción, pero nunca nadie supo nada 

- Eso si que es inusual, bueno, cuenta - contestó el otro intentando dar el comienzo a una nueva conversación.

- Pues puede que me haya liado con alguien, tipo de ir a una cama y.. -

- Sí Lix, por más que sea virgen no soy tonto - dijo con gracia y burla. El rubio se disculpó y prosiguió hablando.

- Pues que ese alguien puede que se llame Seo Changbin - terminó por explicar el rubio, sonrojado miró al suelo recordando la experiencia que tuvo aquella misma noche en la casa de Jimin.

Jisung abrió los ojos impactando por la noticia. ¿Seo Changbin? ¿El chico por el que Félix se volvía loco? Wow, eso si que no se lo esperaba.
Estaba ahora él, en un debate mental. En su parte era algo muy bueno y positivo, por fin el chico que tanto le gustaba le había hecho caso. Pero... ¿Y si era todo una broma?
No le gustaría que su amigo saliese lastimado por ello. Pensó que era mejor felicitar y apoyar con advertencias, iría a hablar con Seo más tarde.

- Felicidades Lix,has hecho que Seo se fije en ti . Pero como se pase de listo tiene mi advertencia - habló mientras levantaba el dedo índice en modo de advertir al otro. Su amigo le dio una sonrisa cansada y le abrazó, obviamente no le rechazó.

- Bueno Ji, tampoco se si realmente quiere algo conmigo - comentó Félix con pena. - Solo se que fue increíble -

- Tú inténtalo, por probar no mueres - le ánimo.

Ambos se levantaron al escuchar el timbre, llegaron juntos a la entrada de las clases (ya que estaban en los patios) y se separaron cada un por su camino tras despedirse con ánimos y fuerzas.


Félix llegó a su casillero a dejar algunos libros que hacían una carga extra en su espalda. Aquellos días eran agotadores porque aún no se decidía muy bien el horario y tendría que llevar todas las mañanas una pila de libros que puede que después ni utilizase la mitad.

Se encontraba colocándolos por colores cuando vio un pequeño papel pegado a la pared de su casillero. Estaba algo torcido, así que probablemente lo metieron por el hueco de su casillero y acabó pegándose malamente.

Cogió aquel posit de color amarillo pato para ver su mensaje en el.

"Te espero en los vestidores tras los entrenamientos" changbin.

Aquel mensaje le impactó un poco, aunque el estuviese enamorado pensó que lo suyo era solo una noche. Por ende, se emocionó y soltó una gran sonrisa que le duraría por el resto de su día.









Era la hora de los entrenamientos de los equipos de diversos deportes. Cada uno en su cancha o campo guiados por un entrenador practicaban las diferentes habilidades. El colegio e instituto SHC eran para claros deportistas que iban a tener un futuro en ello. De allí salieron grandes deportistas conocidos hoy en día, por ello es una escuela claramente conocida.

Terminaron los entrenamientos de fútbol y Lee se encontraba otra vez viendo al de castaño claro bailar. Pero esta vez llevaba una falda de color blanco junto a una camiseta oversize del mismo color. Tenía una pequeña diadema blanca que adornaba sus cabellos y sus tenis igual. Iba todo de blanco y parecía que era un ángel. Embobado miraba como el cuerpo de aquel chiquillo se movía al ritmo de la música y como sus labios se separaban al dar indicaciones. Sus piernas descubiertas era delicadas y pálidas junto a su pequeña cintura.

Ese omega le tenía loco.

Mejor dicho, Jisung le tenía loco.

Esperó a que terminasen el entrenamiento para poder irse, se dirigió a las aulas ya vacías para poder recoger sus elementos que necesitaría para mañana. Mientras buscaba su mochila por la sala, escuchó unos pasos detrás suyo para poder voltearse y ver una silueta conocida.

- Me has estado mirando - dijo Jisung con una sonrisa coqueta. Lee le devolvió la mirada aquella y volvió a centrar su interés en lo que se suponía que estaba haciendo.

- Si te digo que es mentira, estaría mintiendo-
Explicó con gracia.

- Vaya señor Lee, no sabía que usted fuese tan directo - dijo apoyándose en la pared, cansado de tener que liderar todo el grupo.  El mayor vio como este estaba cansado, así que cuando terminó le extendió su mano.

- Venga señorcito omega perfecto, le acompaño a los vestidores-  Jisung le miró mal pero después se volvió una sonrisa pícara.

- Gracias señor popular a los dos días, le agradezco su ayuda - dijo mientras se ayudaba de aquella mano que le ofreció. El alfa pasó la mano por la cintura del omega para ir hacia los vestidores.

- Y aquí le dejó omega perfecto - habló mientras hacía una ridícula reverencia. Jisung rió.

- Muchas gracias alfa popular - agradeció a Lee con una sonrisa sincera. Se quedaron unos segundos mas sonriendo y mirándose uno al otro.  Jisung se elevó poniéndose en releve para llegar a darle un beso en la mejilla a Lee.

- Buenas noches alfa - le dijo antes de adentrarse al vestuario de omegas y cerrar la puerta. Lee se quedó allí unos segundos más mirando a la pared embobado para después marcharse. Y vio que el omega tenía razón, el sol ya había caído.

//- New Boy -//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora