Lily... el nombre endulza su paladar con algo conocido. El calor que se aprieta en su pecho podría ser incluso placentero si no se combinara con el sudor frio que empapa las sabanas por la pesadilla reciente.
Ya con los ojos abiertos en la claridad del día, estira las manos observándolas con ojos sumamente abiertos como si todavía pudiera ver y sentir a la mujer que yacía en sus brazos sin vida. Los largos cabellos de un rico tono rojizo esparciéndose a los lados de un rostro tan pálido. Ojos verdes abierto en una expresión indescifrable que ya no brillan pues toda la luz a huido de ellos. La meció en sus brazos, acunándola como su se tratará de un niño, percibiendo la frialdad del cuerpo lazo.
Lagrimas que no sabe que salen de sus ojos escurren por su rostro, los labios le tiemblan y el dolor que se acumula en su corazón es tanto que le impide respirar con normalidad. Esta solo en la habitación en la que ha vivido los últimos meses, sin testigos que puedan ver su calvario, lo agradece. Porque no hay manera de explicar que a recordado un algo que le esta partiendo el corazón.
"Lily" -susurra lento como si se tratara de una invocación. Pronunciando el nombre conocido como si se tratara de una nana que a escuchado cantar desde que es un crio. Suspira largo, ahogando el llanto y los gritos que quieres salir por su garganta.
Entonces ya no solo la recuerda sin vida entre sus brazos, también puede verla en fragmentos que se presentan repentinamente en su menta, causándole un fuerte dolor de cabeza. Las cienes le punzan con fuerza como si las martillaran con un mazo.
La joven pelirroja sonriente con su cabello largo y rojo, suave y vistoso, sus ojos verdes brillantes con una felicidad casi palpable reflejada en su rostro, sosteniendo un libro entre sus brazos mientras caminan lado a lado. Escucha el sonido de su risa, la suave voz es un eco en sus recuerdos.
Recuerdos de pasillos largos, paredes de piedra pulida, salones llenos de ecos y una niña pelirroja caminando a la par. El reflejo en un cristal le permite verse en ese recuerdo, una versión muy joven de si mismo que no fue difícil de reconocer.
"Nos vemos más tarde Sev" -le dice con familiaridad, la ve a alejarse e incluso cuando la pierde de vista se queda un rato mas contemplando el lugar por la que se ha ido.
Tiene que sujetarse con fuerza la cabeza tratando de aplacar el punzante dolor que va creciendo. Como una presa rota los recuerdos se presentan unos a otros con fuerza. La sensación de ahogo se intensifica. Termina hecho un ovillo sobre la cama de sabanas humedecidas por sus sudores nocturnos, llora en silencio, lágrimas de desesperación y tristeza hasta que pierde el sentido.
Por la mañana cuando despierta con las lágrimas ya secas en su rostro, la confusión sigue aletargando su cabeza, sin embargo, todavía es capaz de aferrarse a los recuerdos de una sola persona, Lily.
Todos los recuerdos que vinieron a su cabeza se trataban de ella, podía recordarla con suma claridad. Recuerdos de su infancia y juventud. Todavía es confuso porque por alguna razón sus recuerdos se vuelven extraños, ve lugares y cosas que no pueden ser reales.
La única certeza absoluta que tiene en la confusión que todavía es su cabeza son dos cosas; la primera es que Lily es el nombre de la mujer de la que estaba enamorado, su gran amor desde la infancia y segundo ella está muerta.
No es mucho, pero es algo. Se consuela con el dolor latiendo en su corazón, abriendo cicatrices de heridas que ni siquiera sabía que tenía. Le llamo "Sev" quizás de cariño o el diminutivo del un nombre que todavía no le dice mas nada.
Aun recomponiendo los pensamientos se niega en decir a nadie sobre los flases que le han venido, por miedo a que le tachen de loco o demente, porque sabe que Lily fue real al menos eso es lo que le dice el corazón, pero ella ya no existe. Mas importante aún, recuerda el llanto de un niño mientras llora con su amada en brazos y no puede evitar preguntarse si ese pequeño es suyo.
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Siempre
FanfictionTras la gran batalla de Hogwarts, el triunfo sigue teniendo un sabor amargo para todos. La lagrimas no dejan de correr mientras alinean los cuerpos con respeto. Pasada la conmoción Harry busca en esas líneas de cuerpos uno en especial. Quiere asegu...