El amor no es para tontos (Después de todo) (Rigleen)

Capitulo 5: A solas

Luego de que los chicos y las chicas hubieran tenido más aventuras acampando, o teniendo incidentes con la barra fija, luego de la fiesta en el salón de baile del parque para Margarita, Mordecai y Rigby se encontraban desocupados de su trabajo, buscaban que hacer, y los videojuegos no eran opción, habían gastado ya todo su repertorio.

Se encontraban solo cambiando canales en la televisión esperando ver algo interesante.
Pasaban por noticieros, documentales de animales, sitcoms de chicas, caricaturas, un avance de una película repleta de acción, un debate gubernamental.

-Wow, espera amigo, regresa el canal.  - Dijo Rigby agitando su mano frente a Mordecai.

Mordecai regresó al avance de la película. 
"La aventura más emocionante del verano, acción, explosiones, traiciones, romance, suspenso. La película perfecta para llevar a tu cita. "Verdadera Tension. Solo en cines"

-Wooaah, amigo, tenemos que ver esa película. - Mordecai estaba embobado.

-Oh hermano, tenemos plan para esta noche. - Ambos chocaron las palmas.

-Si, deberíamos llevar a Margarita y a Eileen. 

-Ohh, ya veo, quieres ir con Margarita. - Rigby entrecerró los ojos.

-O sea... si, pero también quiero que vayas.

-Amigo, ¿por qué siempre Eileen? ¿Por qué no invitas solo a Margarita?

-¿Que, no te agrada Eileen? - Levantó la ceja.

-Claro que me agrada, solo que siempre la invitamos cuando quieres ver a Margarita.

-Oye, también debe ir, es la amiga de Margarita, es como si yo saliera sin ti.

-¿Y? - Rigby alzó los brazos.

-Vamos amigo, ¿cuál es el problema, te pone nervioso Eileen? - Dijo en un tono burlón.

-Noo, ni que fuera tu para estar "oh, ah, sí, claro, jeje" - Rigby imitaba a Mordecai con voz boba.

-Amigo, sabes que le gustas a Eileen, ¿cierto?

-Ah, no... creo. - Rigby se puso nervioso.

-¿Cual es el problema? Es lista, le gusta divertirse, le gustan los videojuegos, vamos, ¿por qué no le das una oportunidad?

-Ese es el problema, es demasiado lista para mi, además, ni siquiera sé si le gusto, y si así fuera, ¿qué?

-No estaría mal que lo intentaras, podrías estar más feliz.

-Yo soy feliz.

-Dije "más".

Ambos guardaron un corto pero significativo silencio.

-Anda, vamos a la cafetería, vamos a invitarlas.

-Bien... - Rigby estaba un poco molesto.

Salieron de la casa y tomaron el carrito de golf para ir a la cafetería.
Una vez llegaron, estos entraron y se sentaron donde solían hacerlo.
Margarita los vio y fue con ellos, eran prácticamente los únicos clientes que se encontraban en ese momento, Eileen fue detrás de Margarita.

-Hola chicos, que raro verlos por aquí.

-Hola jeje, Margarita, solo, pasábamos por aqui. - Dijo Mordecai nervioso.

-Si claro, ¿les traemos sus cafés de siempre?

-Tenlo por seguro.

-Hola Rigby. - Eileen saludó a Rigby esbozando una ligera sonrisa.