Competencia de barcos

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A la mañana siguiente Lee Ji-eun salió junto a _____, quien la llevó a una pequeña tienda donde vendían ropa de segunda mano, cosas muy sencillas, al principio Ji-eun trató de resistirse, sin embargo, sabía que sería completamente inútil hacerlo.

Lee Ji-eun: por cierto, cuando salimos de tu departamento, no pude encontrar mi celular.

_____: ¿de verdad? ¿qué extraño?

Lee Ji-eun: no te hagas la chistosa, sé muy bien que tú lo tienes.

_____: no tenías que haber traído ese aparato contigo, así que lo dejé en un lugar seguro, agradece que no te quité también tu reloj.

Lee Ji-eun: ¿mi reloj? ¿qué tiene de malo mi reloj?

_____: tener un reloj es como tener una cadena, las personas siempre están estresadas y preocupadas porque sienten que se les acaba el tiempo y no pueden seguir trabajando, no ven al tiempo como un regalo, lo ven más como un "verdugo" que les recuerda que se les terminara sin poder terminar su trabajo y eso los hace estresarse, sufrir ansiedad y no poder disfrutar de los pequeños placeres de la vida.

Lee Ji-eun: tú tienes un reloj.

_____: es diferente.

Lee Ji-eun: ¿por qué?

_____: porque el mío no da una hora, en realidad no tiene manecillas, Kookie me ayudo para programarlo y que suene siempre a la misma hora.

Lee Ji-eun: ¿a qué hora?

_____: no lo sé, te acabo de decir que no tiene manecillas ¿cómo sabría la hora en la suena la alarma?

Lee Ji-eun: cada día compruebo más que eres realmente muy extraña.

_____: lo sé, pero no me importa, en realidad ese reloj solo lo hago sonar porque quiero que me recuerde siempre porque quise olvidarme de llevar la cuenta del tiempo, es mejor simplemente disfrutarlo. Bien, vamos a comer algo y después acompañaremos al pequeño Seo Woo-jin a una competencia de veleros.

Lee Ji-eun: ese pequeño diablo ¿tiene un velero? ¿no es muy chico para eso?

_____: la competencia es para niños, cada uno debe de crear su propio barco a control remoto, y al ganador le darán una linda medalla y un pase para comer un helado gratis por un mes.

Lee Ji-eun: ¿por qué lo quieres acompañar tú? ¿por qué no lo puede hacer alguien más?

_____: me ofrecí yo para acompañarlo, no le vi nada de malo con eso, vamos, no seas tan malhumorada, estoy segura de que te va a gustar y es la forma perfecta de usar el tiempo... divirtiéndose.

Lee Ji-eun: de acuerdo, pero si ese pequeño diablillo vuelve a hacer algún comentario sobre mi estatura...

_____: no lo hará, estoy segura de que una vez que se conozcan mejor, se llevarán muy bien... ahora andando.

Las dos se dirigieron al pequeño departamento, cocinaron un poco de kimchi, Bibimbap, Mandu y Banchan, bueno, en realidad la que cocinaba era _____, ya que Lee Ji-eun jamás lo había hecho, o al menos no en muchos años. Al terminar de comer, se pusieron ropa cómoda y zapato deportivo.

Salieron tomadas de las manos, ese pequeño detalle en realidad le gustaba mucho a Lee Ji-eun, desde la primera vez que _____ la había tocado, había hecho que despertara una extraña sensación en ella, quizás intriga o curiosidad, lo que fuera... la verdad era que no le desagradaba para nada.

Al salir del edificio, se encontraron parado frente a la acera al pequeño Seo Woo-jin, quien entre sus pequeñas manos sostenía un pequeño barco, que al verlo era más que obvio que él lo había construido, a Lee Ji-eun le sorprendió lo diferente que se veía sin aquella máscara cubriéndole el pequeño rostro.

Siempre Noviembre (IU & TÚ) (G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora