|• One-shots Shadowpeach •|

002|| [1] Celo de Macaque ||

Como cada semana desde que Xiaotian se convirtió en Monkie kid, se encontraba entrenando en Flower fruit mountain bajo la tutela del gran Monkey king y aunque eso siempre era algo para estar emocionado

Ese día estaba muy apagado, muy distraído, en otras palabras su mente estaba en otro lugar

Esa actitud no paso desapercibida por nadie, aunque para los monitos era algo difícil averiguar que lo que le preocupaba a su príncipe era el paradero del antiguo compañero de su rey

Llevaba mas de una semana buscando a Macaque, sin obtener ningún resultado, ni una miserable pista de donde estaba ¡Absolutamente nada! Era como si se hubiera esfumado en el aire o algo mucho peor...

Hizo una mueca, le desagradaba pensar así, Macaque era su amigo y no quería que ninguno de sus preciados amigos desapareciera.

Recordó las veces que había ido a visitarlo para saber cómo estaba y para oírlo quejarse por horas sobre las emboscadas que estaba sufriendo últimamente, gracias a eso considero la posibilidad de que quizás solo se topo con algún enemigo, que habían tenido una pelea épica y digna de una película, pero que por desgracia había perdido y que ahora se negaba a pedirles ayuda porque se sentía avergonzado, o porque no quería que Wukong lastimara su orgullo, aunque también considero que tal vez solo se había vuelto a pelear con Monkey king y que necesitaba espacio para calmarse

Bueno, cualquiera que fuese el caso, iba a encontrarlo.

Después de sus entregas solía ir al dojo, pero todo seguía igual, un día decidió ir a la residencia de los Bull, ya que sabia que Pif era su hermana jurada y creía que ella sabría de su paradero, pero para su mala suerte lo único que consiguió fue un sermón sobre los limites y la privacidad de Macaque...

Fueron dos horas muy intensas, pero le alegraba saber que no era el único que se preocupaba por él.

Cuando noto como el sol se escondía en el horizonte paro de entrenar, guardo su personal y busco a su mentor con la mirada, hasta que lo encontró recostado en su nube.

—Monkey king— se acercó a pesar de las miles de dudas que tenía sobre comentarle su idea, ya que siempre que hablaban sobre el de seis orejas se formaba una tensión entre ellos, al punto que terminaban discutiendo.

—¿Nmh?— giró su cabeza hacia donde provenía la voz de su sucesor, lo miro, estaba justo a su lado, analizó su expresión, se notaba que quería decirle algo importante, se incorporo perezosamente, quedando sentado en su nube —¿Qué pasa, bud?—

—Ah, bueno... Es que— se rasco la mejilla, mientras tenía la mirada fija en el suelo, estaba nervioso, era molesto no saber cómo su maestro reaccionaria, soltó algo de aire, a la vez que levantaba la mirada —se trata de Macaque— dijo con firmeza.

—¿Qué pasa con él?— pregunto secamente al oír ese nombre.

—Hace tiempo que no sabemos de él y la verdad estoy algo preocupado... Entonces yo...— lo que quería decir seguía atorado en su garganta.

—¿Kid, me estás pidiendo permiso para ir a verlo?— interrogo con diversión.

—Algo así— rio torpemente, sintiéndose un poco más relajado gracias a la broma —de hecho, quería saber si me acompañas, se que no se llevan bien, pero últimamente no parecen querer, ya sabes, matarse, así que por favor... ¿Si?— rogo juntando sus manos frente a él.

—Hnm— reflexionó unos instantes, tenía razón, incluso peleaban menos, pero debido a los recuerdos aún sentía cierta incomodidad con su presencia —no lo sé, no me parece una bue...— fue interrumpido.

—No me obligues a usar los ojitos de cachorro— amenazó infantilmente.

—Agh, bien, tú ganas— se frotó el cabello, odiaba no poder resistirse a él —veamos que está tramando—