- Y básicamente es todo lo que hay aquí señor Ferreira
- Excelente Alexa. Igualmente todos los que están contratados tendrán una renovación, nadie será removido y me encargaré personalmente de darles una bonificación
- Eso es muy generoso señor, le agradecería mucho
- Puedes retirarte
Quién diría que comprando este basurero sorprendería a Esmeralda….
Estoy seguro que se sorprendió gratamente sobre quién soy.
Cambiaré de estrategia con ella…
Tal vez no es quién pensaba
El sonido de mi móvil me saca de mis pensamientos
- Señor Malvamaro … le gusta hacerse extrañar
- ¿Qué sucede Brenda?
- Compraste el asilo
- Si ya lo sabes ¿Qué quieres exactamente?
- ¿Por qué estás tan odioso conmigo?
- Sabes que así soy
- Pero no me rechazabas, te encanta follar conmigo siempre … ¿Estás cambiando de bando?
- ¿De qué vas?... Sólo no quiero tener sexo en estos días
- Sabes muy bien que nadie me rechaza
- No lo tomes así. Sólo es estrés
- ¿Estás saliendo con alguien?
- En mi vida privada mando yo. Y si no tienes otra cosa que decirme , adiós
- Señor – tocan la puerta y luego entran a mi nueva oficina – ya es hora de irnos
- Seguro, salgo en un momento
Bueno Diego, hoy tienes que salir con Esmeralda.
Esa mujer tiene que ser tuya
- Buenos días doctora Velásquez
- Buenos días señor Rodrigo. Le tengo excelentes noticias
- Eso me alegra – la miré fijamente. Me gustaba hacerla sentir intimidada mientras adivino en lo que piensa -
- Su negocio está oficialmente registrado y es completamente legal comenzar con sus actividades
- Pues esa es verdaderamente una excelente noticia… yo tengo algo más para usted
- Ah sí, ¿Qué es?
- Pues… con todas las cosas que tengo por hacer me gustaría que también llevaras el tema legal del traspaso del asilo
- ¿Cómo?
- Es que recién lo compré y quiero tener todo completamente legal.. Usted entenderá
- Seguro. No se preocupe, ese es. .. mi trabajo – ella era preciosa.
Es esa mujer con la que todos sueñan casarse y formar una familia.
Pero yo no haré eso. Me conformo con llevarla a la cama y probarla
Aunque admito que el que sea tan difícil me gusta mucho … así lo disfruto más
Esmeralda
- ¿Entonces el tipo es súper rico y súper bueno?
- Tal vez Val … es decir, pago un millón de dólares por el asilo
- ¿Qué?
- Seguro no querrían venderlo y él les hizo esa oferta
- Es increíble… disculpa Esme tengo que colgar, hablamos mañana, ¿Te parece?
- Seguro Val adiós. – llegué a casa y miré a Ernesto , él estaba realmente triste por la situación con Carmen.
Los niños jugaban y parecían estar felices, pero extrañaban a su madre .. con tal, sólo tienen cuatro años
No podía sacar de mi mente a Rodrigo
¿Qué me sucede?
Me tiene tan desconcentrada
¿Quién es el? … Hay algo que todavía no encaja con ese sujeto
Eran las once a.m. y estaba arreglando los papeles de propiedad del asilo para el señor Rodrigo …
Respiré profundo antes de entrar en su oficina.
Seguro comenzaría a adularme o a decirme estupideces como que me veo hermosa
- Buenos días doctora Velásquez
- Buenos días señor Rodrigo, traje todos los documentos que necesita firmar por la propiedad
- Eso es lo que llamo eficiencia
- Gracias – seguramente me va a invitar a almorzar… y tendré que inventar algo para negarme
Leyó y firmó todos los documentos
- Qué descortés de mi parte, ¿Se le ofrece alguna cosa? Puedo mandar a qué le traigan café si desea – nos miramos fijamente –
- No, estoy bien. Gracias – desvíe la mirada . Qué extraño que no me ha dicho algo estúpido –
- Bueno, muchas gracias por venir, creo que es todo
- Necesito una copia de todos los…
- Puedes decirle a mi asistente Alexa, ella te dará todo lo que necesites
- Gracias… - ¿ Por qué no me invita a almorzar?
Me levanté y fui con la señorita Alexa…
No entiendo, no me halago o dijo algo estúpido y ya no me invitó a almorzar
¿ Por qué me importa?
¿qué me pasa?
- Estás enamorada – dice Val a través de la llamada –
- ¡No! Estás loca, ni lo conozco
- Eso no importa. Créeme
- No .. claro que no
- Deja de negarlo, sólo lograrás enamorarte más
- Es que no es cierto… y .. además es.. fue.. tan protocolar , ¿Qué le sucede? Siempre me halagaba o… - ella rió - ¿Qué es tan gracioso?
- Tú
- ¡Por favor! Valentina … me tengo que ir. Adiós
¿Pero quién me entiende? Ayer no quería que me mirara