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¡Clash!
El ruido de una ventana rompiéndose llamo la atención de los vampiros que estaban en el interior de la casa. Thomas había tratado de hablar con Snow, algo que claramente no resultó bien.
—Lo siento si, admito que tuve la culpa pero también tienes que entender que fue tuya.- ese fue la gota que derramó toda la paciencia de Snow.
—¡No fue mi culpa! ¡Cuántas veces deben entender que la persona que fue avaricioso y mentiroso fuiste tú!- le replicaba Snow, los vampiros y la humana salieron de la casa para ver qué pasaba, estaban todos menos Carlisle que tenía que ir al hospital.
—Tu también querías poder, tú tenías el libro y lo usaste.- trataba de hablar con calma Thomas, ya estaba con varias heridas.
—Lo tome para salvarte idiota, hize todo por un hombre como tú y me lo paga así, trataba de ser comprensible contigo pero tú solo eres un egoísta, quieres remediar todo, busca la manera de que nos separen de estos niños y nos mantengan con vida.- habla entre dientes Snow antes de derretir el hielo que cubria partes del cuerpo de Thomas.
—¿Tu sabes dónde está el libro no?
—No sigas Thomas.- Snow se dió la vuelta para irse pero se detuvo cuando Thomas volvió a hablar.
—No Snow, tu sabes dónde está, fuiste la última que lo uso, ¿Porque proteges tanto ese secreto eh? Sabes que es nuestra última salida.- alza la voz Thomas
—¡Porque lo destruí maldita sea! ¿Sabes porque soy la del nivel cinco? ¡Porque use el libro y mi cuerpo lo absorbió todo! Por eso me mantuve con vida tanto tiempo, pero al momento de entrar en Hanna ese poder se pasó a ella.- eso sorprendió a la mayoría.
Todos ya sabían de la leyenda por la conversación que había tenido Leah y Hanna.
—Así que Hanna es el libro, que interesante. Pero ¿sabes que la pusiste que un grave peligro no?- sonríe Thomas.
