Mientras se duchaba, Gun se sintió mareado y su cuerpo extraño, culpó al delicioso vino que había tomado en la cena con su esposo pero todo empeoró cuando en el aire pudo sentir las intensas feromonas de Off, incluso a pesar de la distancia de sus habitaciones, el olor rozo su piel y lo excitó.
Gun empezó a temblar, su cuerpo se sentía caliente, estaba tan mojado y deseaba tanto a Off en su interior. Su respiración se empezó a acelerar. Era su celo, su primer celo y dolía tanto que se sentía morir.
Gun empezó a jugar con su agujero introducía sus dedos una y otra vez pero no era suficiente, sin su alfa, no lo soportaría.
Off casi rompió la puerta por la desesperación, su celo había llegado sin saber porqué, provocando también el de su compañero destinado, ahora no tenía dudas, no sería nadie más que Gun.
Una magnífica vista lo recibió, Gun se estaba masturbando, tenías los ojos cerrados, los labios entreabiertos mientras pronunciaba su nombre una y otra vez, Off jamás se cansaría de mirarlo, era hermoso y perfecto, se acercó rápidamente y lo besó. Gun tenía los labios exquisitos. La cordura de Off fue destrozada por el ardiente sentimiento de amar a Gun. El omega tenía sus pequeñas manos tensas sobre el cuello de su camisa.
Off lo miró acunó su rostro y lo acarició. – ¿Quiero hacerte el amor? – no podía creer lo suave que era su piel.
Gun inhaló, y empezó a succionar uno de los dedos de Off.
Off sujetó mas cerca a su pecho el pequeño cuerpo de Gun y besó su cuello hasta llegar a su plano vientre. Gun sollozaba ante cada caricia pero se dejaba guiar fácilmente, finalmente Off alineó su miembro en la lubricada entrada de Gun y lo embistió sin restricción más y más profundo cada vez.
La suave voz de Gun resonaba en su oído, mientras sus pequeños dedos se aferraban abrazando su cuello con fuerza.
–Serás mío completamente – dijo Off, clavando sus dientes hasta romper la suave carne, sellando su lazo.
Off pudo sentir su corazón detenerse y volver a latir al mismo ritmo que su delicado omega, quien se aferraba a cuerpo. Off secó sus lágrimas y lo besó tiernamente. Después de embestirlo unas veces más, su nudo se formó liberando su espesa semilla. Gun tenía las mejillas sonrojadas y aún con las uñas clavadas en su espalda. Off besó su frente y se sintió duro otra vez. Esa noche se amaron hasta que sus cuerpos se saciaron y cayeron del cansancio.
