Ya había empezado la clase y yo estaba. como siempre, sentado en el último pupitre.
Podía escuchar las críticas provenientes de Louis, Liam y Zayn, pero al fín y al cabo era lo que hacían siempre y no me quedaba más remedio que ignorarlos. La profesora empezó a hablar sobre algunos poemas de los que nos mandó hacer un comentario la semana pasada cuando se escuchó la voz de un chico proveniente de la puerta.
-¿Puedo pasar? -Un rubio entró al aula vergonzosamente, a pasos cortos y poco decididos.
-Ya lo has hecho... -Dijo Louis desde su mesa provocando una serie de risas a su alrededor.
-Silencio. -Ordenó con voz chillona la profesora.- Eres Niall, ¿verdad?
-Uhm.. Sí. -Murmuró el chico, algo intimidado por ser el centro de atención en el aula.
-Muy bien Niall... Puedes sentarte...
-¿Al lado del chico de pelo rizado? -Preguntó señalándome mientras yo bajaba la mirada al suelo rezando por que la profesora dijese que no.
-Harold, no te molesta, ¿verdad? -Todos rieron de nuevo ante el comentario de Louis. Cualquiera sabe a estas alturas que odio que me llamen Harold.
-Silencio, ¡Tomlinson! -Chilló de nuevo la profesora.- Siéntate y prosigamos con la clase de una vez, no tengo toda la hora. -Dijo sujetando su libro con firmeza y apuntando el asiento de mi lado con la cabeza. Bufé discretamente cuando el chico se sentó y me ofreció una sonrisa amable. No pretendía tener un amigo a estas alturas.
Puede sonar raro, pero esa clase me aburrió bastante ya que algo me distraía; Quizás eran los ojos de aquel chico, o tal vez su sonrisa o aquel extravagante peinado. Seguramente pronto tendría mil chicas a sus pies.
-Hey, Harold. -Dijo Niall chasqueando sus dedos frente a mi nariz.
-Uhm.. ¿Perdona? -Balbuceé.
-Ya se han ido todos... Se ve que estabas muy distraído. -Rió dulcemente en cuanto hice una mueca.
-Sí, supongo... De todas formas, no salgo al patio.
-¿Por qué? -Preguntó curioso aguantando mi mirada.
-Nada en especial.
-Oh, de acuerdo... -Se hizo el silencio entre ambos. Al fin.- Yo no conozco a mucha gente aquí, así que también me quedaré, ¿te importa?
-No, para nada... -Dije de mala gana. El recreo, mi único momento de paz, se estaba viendo interrumpido por un chico nuevo con extraño acento, y eso me irritaba.
-Bien.
Niall saco su almuerzo y se lo comió sin abrir la boca más que para masticar vulgarmente. Para mi desgracia, nada más terminar se giró hacia mí y posó la mirada en el libro que estaba leyendo. Le miré de reojo esperando que hablase.
-¿Qué lees?. -Preguntó curioso ladeando la cabeza.
-Uh... Romeo y Julieta. -Respondí apartando la mirada y colocando un punto de libro entre las hojas.
-Nunca lo he leído. -Murmuró pensativo antes de golpear sin cuidado mi brazo derecho.- ¡Ya me lo dejaras algún día! -"NO" pensé. Aquel era mi libro favorito. No se lo dejaría ni a mi madre.
-Si, claro. -Mentí sonriéndole de lado.
Niall se levantó a tirar el envoltorio de su bocadillo, después regresó a sentarse al lado mío y ojear algunas páginas por encima. Parecía un chico muy hablador y gracioso, igual que Louis... Seguramente ambos se llevarían bien si el ojiazul le dejara formar parte de su grupo, aunque eso no ocurriría simplemente porque era el nuevo de la clase; el fenómeno del momento.
Estaba tan enfrascado en mis pensamientos que no me di cuenta de que había sonado el timbre y la clase de matemáticas estaba por comenzar.
De pronto sentí unas ganas tremendas de que se acabaran las dos largas clases que quedaban y poder marcharme a casa. No me encontraba de humor.
-Me siento mal. -Le dije a la señorita aprovechando aquel silencio poco común en la clase.
-Styles, ¿no sabe que se tiene que levantar la mano? -Me regañó ella frunciendo el ceño.
-Lo siento.
-Espero que sea algo importante... Baja a enfermería. -La mujer miró a mi compañero por unos segundos.- Niall, acompáñale. -Ordenó ella. El rubio y yo nos observamos por unos segundos y empecé a recoger mis cosas.
-¿Te encuentras bien, Harold? -Preguntó amablemente Niall mientras bajábamos las escaleras a paso rápido.
-Sí, bueno... Tan solo quiero irme a casa. -Dije arrastrando mi cabello hacia atrás con pesadez y recolocando la mochila en mis hombros.- Ah, y por favor, no me llames Harold, lo odio. Me vale con Harry.
-De acuerdo Harry. Lo siento. -Dijo recalcando mi nombre, parecía querer metérselo en la cabeza.
-No te preocupes. -Le quité importancia con un movimiento de muñeca y seguimos el resto del camino en silencio.
-Llegamos. -Anunció en voz alta poco convencido de que éste fuese el sitio correcto donde tenía que dejarme; problemas de ser nuevo.
-De acuerdo, Niall. -Dije mirándole y sonriendo sinceramente hacia él por primera vez en la mañana.- Muchas gracias.
-No hay de que, Harry-. Resaltó de nuevo mi nombre y me guiñó un ojo con complicidad antes de marcharse por donde había venido.
Esperé a que me atendieran, pero por lo visto no había nadie cerca y me cansé de esperar así que fui al baño a mojarme un poco la cara. Al mirarme al espejo me sentí realmente horrible. Esas enormes ojeras y los rulos enmarañados... "Es normal que Louis no se fije en mí." pensé en voz alta.
-¿Qué? -Preguntó alguien en el regazo de la puerta.
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Mi Pequeño Secreto [Larry Stylinson] (Pausada.)
RomanceMi nombre es Harry, tengo 18 años y vivo en Londres. Estoy en bachillerato y bueno... Se podría decir que soy el más inteligente de la clase. El típico nerd al que nadie quiere y todos desprecian; El que vive alejado del resto y se refugia en los li...