☕️ 𝑼𝒏 𝒓𝒆𝒆𝒏𝒄𝒖𝒆𝒏𝒕𝒓𝒐 𝒇𝒂𝒎𝒊𝒍𝒊𝒂𝒓.

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En esa misma noche ambos hombres se habían pensado, como si fuera un castigo divino destinado a demostrar que su unión después de la pelea era incluso más fuerte de lo que era antes de pisar el campo de batalla.

Hércules lo tomo como una señal en cambio Jack tomo aquello como una mala noche más de las que solía tener de vez en cuando, un buen té antes de dormir podría arreglar las cosas y librar tensiones mentales que lo atormentaban en su habitación, obligandolo a levantarse más temprano de lo habitual pero a quien engañar, adora ver el sol saliendo cada mañana por sobre el mar, aquellos momentos lo alentaban a seguir con vida, no es que no le gustará estarlo, pero lo hacían sentir con menos culpa, porque gracias a él la naturaleza como la sociedad seguía su curso en la tierra, gracias a él y sus nuevos amigos que dieron todo de sus cualidades para luchar por una causa común.

Justo cuando pensó en ello el vibrar de su teléfono le recordó el motivo por el cual tenía una leve emoción el día de hoy, algunos de los representantes de la humanidad iban a ir donde se encontraba nuestro peliblanco, a instalarse por la zona ya que estaban decididos a cambiar de ambiente como tambien tener nuevas experiencias y no había nada mejor que hacerlo entre amigos, una familia por elección.

Nostradamus fue el primero en llegar a la casa de Jack, lamentablemente para el peliblanco no pudo librarse de el profeta por la ausencia de Hlökk y Ann que se encontraban afuera de la ciudad por unos días junto a otras valquirias y nuestra rubia favorita, Eva, quien había formado un gran lazo con las demás madres de los luchadores.

Cuando el pequeño profeta llegó a casa de Jack pudo verlo a lo lejos como recibía algunos pedidos del Olimpo que siempre eran Ninfas o sirvientes de Hermes quienes hacían ese tipo de entregas, fue el peliblanco que se encontraba en la entrada recibiendo aquellas compras que tenia la pequeña mujer en brazos que se despidió para luego irse.

—Vaya Jack, jamás te había visto con un rostro tan amigable.—dijo Nostradamus con una sonrisa algo burlona.

—Es un gusto volver a verlo Sir.—Respondió Jack para entrar a casa con algunas compras en sus brazos, el rubio lo siguió hasta cerrar la puerta detrás de él.

—Vine antes, pero no vengo a hacerte perder el tiempo, así que... o lo dices tu de buena manera o te saco todo a la fuerza.

—No entiendo de que me habla, ¿Podrías ser más especifico?—inclino la cabeza levemente hacia un costado demostrando lo extraño que era para él esa pregunta.

—Insomnio, apenas respondes el llamado de Sasaki, constantes bajones, te ves más decaído que de costumbre nos puede separar una pantalla pero créeme que se reconocer cuando alguien anda con algo en mente y ese alguien eres tu.— se lanzó en el sofá para estirar todo su cuerpo, su viaje fue largo.

—Creo que solo estoy cansado.— camino hacia la cocina ya que iba a preparar un pequeño tentempié para él y su única visita.

—¿Crees?, Jack no olvides quien soy.

—No lo hago, pero tampoco te cuestionó...

—Soy un experto en las cosas que te pasan y podría ayudarte si tienes la delicadeza de abrirte, soy una tumba y lo sabes.—hizo un movimiento con tu mano sobre sus labios como si los cerrara para luego tirar esa llave invisible.

—Yo estoy bien, ahora las cosas han sido complicadas por acá pero el tiempo es un buen factor en esas situaciones Sir... las malas noches se lo debo a mi falta de querer dormir, las parálisis del sueño que siempre padecí, espasmos en la noche mhm, nada nuevo Michel.—lo contaba como algo tranquilo a pesar de haber sufrido mucho en un comienzo en procesar todo ese dolor.

—No normalizes esas cosas, aunque no tengo nada que decir ante un señor que ama ver colores o lo que sea que hagas con tu ojo todo raro.

Desde el final de la pelea Jack solo usaba un parche especial para su ojo, un pequeño cuadro con los ligas que le daba la forma de una mascarilla pero en vez de ser para medio rostro solo lo era para su bello ojo carmesí.

𝓓𝓮𝓪𝓻 𝓖𝓸𝓭; Hércules x Jack el destripador - SNVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora