ʟᴇᴛ ᴍᴇ ᴛᴇʟʟ ʏᴏᴜ ᴀ sᴛᴏʀʏ (𝕐𝕒𝕟𝕕𝕖𝕣𝕖!𝐕𝐚𝐫𝐢𝐨𝐮𝐬)

¡𝓨𝓪𝓷𝓭𝓮𝓻𝓮! Oc x Lectora

𝗣𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮𝗷𝗲 𝗬𝗮𝗻𝗱𝗲𝗿𝗲: Karla

𝗖𝗮𝘀𝗼:Bullying colectivo, ¿Suicidio?, mención de lesbianismo, homofobia, maltrato físico, etc.

𝗔𝗻𝗶𝗺𝗲/𝗺𝗮𝗻𝗴𝗮 𝗼 𝘃𝗶𝗱𝗲𝗼𝗷𝘂𝗲𝗴𝗼: Ninguno, fue creado por la escritora.

𝗣𝗮𝗿𝘁𝗲: 1 de 1

𝗧𝗲𝗿𝗺𝗶𝗻𝗮𝗱𝗼: Si

𝗔𝗱𝘃𝗲𝗿𝘁𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮: Este trabajo serán las bases para un proyecto escolar que estoy haciendo ¡Que lo disfruten!

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Todavía tengo recuerdos de haberte conocido,

Era un Lunes por la mañana, me habías defendido del gran cuarteto de imbéciles que me vivían jodiendo la vida.

Fue algo tan simple como llamar al director y decirle que su hijo estaba siendo un idiota, lo cual significó mucho para mi.

Sentía la sangre fluir por mi nariz, el ardor palpitante del golpe que me habían dado cuando decidí responder ante el insulto me generó tal ira que sentía que finalmente iba a explotar. Pero no lo hice, no lo logre por ti.

Llegaste en medio de la multitud, el padre de Arton tenía tal ira en sus ojos que parecía capaz de sacar su cinturón y cagarlo a latigazos en medio del pasillo, pero se limitó a agarrar el buzo en la parte de su nuca, y arrastrarlo a la dirección, intentando no elevar más sus insultos en voz baja.

La cara de miedo de ese pelotudo clavada ahí durante días fue lo más satisfactorio que vi en toda mi existencia. Cada día, cada hora, cada segundo, ese rostro de arrepentimiento y tristeza silenciosa me dio un placer que nunca conocí.

Pero, pasemos a lo importante; vos.

---Che, ¿Aaron volvió a molestarte? ---Me preguntaste al día siguiente.

Me quedé estática por un segundo; decidí ir a la escuela incluso con una venda en toda la nariz y un algodón clavando mis fosas nasales, pero no me esperaba esto.

Instintivamente temble; entre balbuceos te respondo que no, con nervios de tu sola presencia.

Lo único que supe fue tu nombre, uno tan bello que me daban ganas de guardarlo en una caja y verlo cada día antes de empezar el día, porque se que me darían las energías hasta para enfrentar al mismísimo infierno.

No soy alguien superficial, pero debo de admitir que tu aspecto fue algo que me obliga a mirarte cada maldito segundo; la estética que llevabas, que se complementaba dulcemente con tu rostro y tu personalidad, daba como resultado algo que sólo el más experto de los creadores de esta historia pudo haber creado.

Ante mi respuesta, una sonrisa gentil adorno tu rostro.

---Me alegro ---Mencionaste, antes de irte.

El sólo hecho que caminaras, de escuchar el sonido de tu calzado pisar el suelo me generaba una sensación de nerviosismo nunca antes conocido.

¿Era esto el amor que tanto había soñado sentir?

Te fuiste, te retiraste del lugar, sospeche que te fuiste con tus amigos, y de hecho, inconscientemente toque mi pecho, en la parte donde se supone que está mi corazón; estaba a un ritmo increíblemente rápido.

El resto del día estuve con una sonrisa en mi cara, irónicamente feliz a pesar de que la sangre que salía de mi nariz quebrada fue empeorando y el dolor que pase cuando fui al médico fue increíble, pero eufórica, ¡Finalmente me enamoré! ¡Y este dolor sólo era una prueba de que no es un sueño! Y de alguien con el cual puedo salir perfectamente, ¡Alguien a quien le puedo hablar! Sólo hace falta.. conocerte.