Dear Omega

09

Minjoon seguía en crisis, no lo demostraba, pero en su mente ya tenía a miles de Minjoons corriendo de un lado a otro tratando de poder decidir una respuesta a la pregunta que les había hecho el rubiecito.

Y Juwon solo le sonreía dulcemente esperando una respuesta pacientemente, ¡Definitivamente no ayudaba al pálido!

"¡Ejem!" Namoo interrumpió los pensamientos de su amigo. "Min, no hagas esperar al profesor" le dio un leve codazo en forma de burla, y Minjoon ya lo maldecio en mil idiomas.

"Yo, bueno..." Empezó a decir el padre soltero. "Podemos salir algún día, creo..." Incluso decir eso se le hacía extraño, hacia mucho tiempo no tenía citas, y ahora mismo se sentía un cachorro adolescente aceptando su primera cita.

"¡Perfecto!" El omega demostró su felicidad sin ser discreto. "¡Digo...!" Pronto se avergonzó y fue demasiado lindo a los ojos de Minjoon. "Deberíamos ponernos de acuerdo por mensaje, ¿Ya agendaste mi número, cierto?"

"Oh, profesor" hablo Namoo con una sonrisa burlándose de su amigo. "Debería ver cómo lo tiene agen-"

"¡Okey! ¡Creo que es hora de irnos, Namoo! ¡DaeHyun tiene que comer!" Pronto interrumpió el pálido alzando la voz, y cuando noto que su amigo ya no hablaba, solo aclaro la voz suavizando la mirada cuando volteo hacia Juwon. "Gracias por cuidar de mi cachorro, profesor"

Juwon sintió extraño la palabra profesor viniendo de su predestinado, ya que, sabía que en un futuro no muy lejano, se llamarían de otra forma, y tratarían de diferente forma, y eso lo emocionaba, no lograba imaginar la cara de sus padres cuando se enterasen que su hijo ya tenía un alfa en su vida, solo faltaba el cortejo y muy pronto serían pareja, con cachorro incluido.

"No es nada, Min, por favor, llámame cuando no estés ocupado" pidió amablemente con una sonrisa.

"¿Ll-llamar?" Y de nuevo fue un cachorro adolescente con su primera pareja.

"Para nuestra cita" aclaro con una leve risa, de alguna forma, al rubio se le hacía adorable los repentinos nervios del alfa.

"¡A-ah, claro!" Sonrió con vergüenza y quiso esconderse atrás de su amigo.

"Entonces...nos vemos mañana, Minjoon"

Y sin previo aviso, Juwon depósito un inocente beso en la mejilla del pálido, para después volver a entrar a la guardería.
Minjoon se tambaleó, ya que, su lobo se había emocionado muchísimo, y a él, lo consumía el rojo de sus mejillas.
Namoo tuvo que sostenerlo entre risas, para después llevarlo al auto del pálido, que seguía estacionado desde la mañana.

"Controlate, un día de estos lo espantaras" se burló el moreno.

"No puedo, mi lobo se vuelve loco cada que lo tengo cerca" respondió mientras acomodaba a su cachorro en la parte de atrás del auto, en su sillita. "Y eso que no lo viste en la mañana, cuando conoció por primera vez al profesor"

"Me imagino" hubo una pausa por parte de Namoo viendo solo como su amigo acomodaba a un DaeHyun muy dormido en su silla. "Por cierto, debería ir con el doctor Lee, para ver cómo está tu lobo después de estos años sin ti"

"Lo sé.."

Minjoon entro al auto en la parte del conductor y vio a su amigo recargarse en la ventana.

"Sigo sin creer que está conmigo de nuevo, tengo que hablarlo también en terapia"

"Se pondrán muy contentos todos, y ya estoy viendo la cara de Hoseok preguntando por tu predestinado" río contagiando al pálido, seguro el más feliz de toda la situación sería el de sonrisa contagiosa.