Robin veía a lo lejos a Finn con Donna, todavía no podía superarlo, si solo Finney no lo hubiera dejado hoy estuvieran cumpliendo un año de novios, habían vuelto sus problemas alimenticios, tenía ataques de ansiedad, no sé sentía seguro consigo mismo, se sentía una carga para el mundo, Anne era la única que lo entendía la amaba mucho, era como su hermanita menor, se levantó de su mesa y rápidamente se dirigió a los baños, quería llorar, Anne lo venía siguiendo, sabía que no podía entrar al baño de hombres pero por su mejor amigo haría de todo.
Robin sal de ahí -Hablo la rubia mientras tocaba la puerta.
Déjame Anne quiero estar solo -Hablo el moreno detrás de la puerta.
Está bien, ¿luego vas a mi casa para una noche de películas? -La rubia trataba de animarlo.
Voy si me siento bien, sal de el baño podrían verte -Dijo el moreno unos segundos después se escuchó la puerta cerrarse.
Se sentía demasiado mal, había tratado a su mejor amiga de la mierda.
Después de unos minutos salió del baño tenía los ojos hinchados de tanto llorar, se lavó la cara un poco para disimular.
Al salir se topó con Finn quien solo lo empujó.
¿No te fijas idiota? -Reclamo el castaño, su padre le había obligado a tratar mal al moreno.
Aparte de marica ciego -Finney pronunció estás palabras para luego entrar al baño.
¿Finn le había hablado mal?, Sí, ahora se sentía peor que antes.
Desearía ser Donna ella era perfecta, cuerpo bonito, buenas notas, linda, no sé metía en problemas, no tenía problemas alimenticios, no tenía ataques de ansiedad, y sobre todo tenía padre.
El moreno se encontraba derramando algunas lágrimas, se las limpio y se dirigía de nuevo a la mesa con sus amigos pero tocó el timbre indicando la última hora de clases, Robin se quería matar, tocaba matemáticas, eso significaba que se debía sentar con el castaño, tenía miedo y mucho.
Al llegar al salir pasó y sí ahí vió a Finn, se veía realmente lindo, miraba hacia la ventana, su perfil era hermoso, Robin podría pasar mirándolo horas y no se aburriría.
Camino unos segundos, dejó su mochila en el piso y se sentó, el profesor todavía no llegaba, se había formado un silencio incómodo entre los dos chicos, el moreno se recosto sobre la carpeta y se quedó dormido, no había dormido muy bien desde su ruptura.
Pasaron unos minutos recién el profesor llegaba, había tenido unos problemas.
Oye niño, el profesor ya llegó. -El castaño sacudió el cuerpo de su exnovio logrando despertarlo.
Gracias Finn -Hablo el moreno.
Llámame Finney, Arellano -Hablo el castaño en un tono seco.
Robin solo se quedó mudo, sintió como su corazón se partia, prefirió tomar atención a la casa y no pensar en lo que estaba pasando.
-A
Decidí ponerle un poco de mi vida a la de Robin, es una forma muy buena de desahogarse, bueno en fin,Robin me representa.
