Amanda Collins y la Luna de cristal

CAPITULO XIII: FUSIÓN DE ELEMENTOS I

Todo paso muy rápido ante nuestros ojos, esa ola nos sorprendió dejándonos unas ligeros rasguños, de repente sentimos un calor intenso conforme íbamos arrastrados por la ola. En cuanto dimos cuenta ese maldito mono nos quería cocinar vivos, sin esperarlo un tipo semidesnudo nos rescató de un tiro colgándose entre los árboles.
- Tomen mi mano rápido – gritó ese hombre.
- ¡Agarrense fuerte! – gritó Jason y enseguida nos tomamos de las manos.
El rescate del agua fue un éxito pero comenzaron a caer rayos del cielo dirigidos hacia unos metros de nosotros, pareciera que alguien o algo los controlará.
- Venid conmigo, los protegeré – dijo el hombre primate.
- No tenemos opción – dijo Amanda mirando hacia atrás.
- Yo te sigo a donde vayas – Jason habló asimismo.
- Vamos, ese mono nos atrapará si seguimos aquí – volvió hablar ese tipo.
Sin más que decir caminamos tras ese extraño mientras nos contaba su historia iniciando con presentarnos a un grupo excluido dónde ese mono les obligó quedar, su nombre es Aiku y tiene 3 años esperando un milagro para poder utilizar sus poderes contra ese mono; una noche que meditaba notó como aquel animal obtuvo dos poderes peligrosos para el pueblo, de alguna extraña manera su aspecto físico cambio drásticamente.
Bastó unos segundos para ser descubierto y entrar en combate con él, al comienzo iba ganando la pelea pero luego de recibir un golpe en la cara este le quemó la mitad del rostro con el elemento del fuego, en cuanto quiso escapar el mono lo arrastró con agua lejos del pueblo asegurándose de que nadie supiera la verdad.
Tras pasar un tiempo la gente se dio cuenta de algunos cambios en los monos, su actitud se había vuelto amenazante. La mitad del pueblo se quedó con el mono de líder mientras el resto permanecía en una cueva que hallaron lejos de esos malvados animales.
- A pesar de haber fallado he estado practicando con el poder del agua y el aire – dijo el primate.
- ¿Y por qué no lo enfrentan? – se me escapó la pregunta.
- Ese mono es muy listo, tendría que tener la fusión de los cuatro elementos para poder vencerlo. – apretó puños.
- Pues debemos combatir a ese mono para poder avanzar a nuestro siguiente destino – dijo Jason alzando la mirada hacia el cielo.
- No será fácil, amenos que alguno de ustedes sepa manejar algún elemento – el primate hizo una risa burlona.
- Basta de juegos, necesitamos encontrar la siguiente pista y salir de aquí lo mas rápido posible – Amanda sonaba muy molesta.
Paramos antes de la cueva el primate inicio contándonos quien puede ser apto para manejar los elementos sin perder el control, afortunadamente uno de nosotros sabía manejarlos pero no sabíamos quien era esa persona. Realizamos un ejercicio tipo yoga para relajar nuestra mente y ver si alguno podría manejar el elemento Tierra o aire.
Estiramos los brazos y piernas para doblarnos y después bajo una pelota gigante deslizarnos sin tocar el piso, fue entonces que tras varios minutos empecé a sentir que flotaba y al abrir los ojos me caí.
- Ya lo tenías, ¿Qué sucedió? – preguntó Amanda sorprendida.
- Volveré a intentar, esto es nuevo – me ganaron los nervios.