MI ALUMNA MI AMANTE

CAPITULO 15

30 de mayo de 2019

Silencio. Sólo respiraciones agitadas resonaban por la sala. De un lado, Valentina, con los ojos abiertos y las manos temblando levemente. De otro, León, Luis y Helena. La misma tenía la mandíbula trabada y fusilaba a su hija con los ojos.

- ¿Qué haces aquí? - preguntó la rubia aún medio desconcertada por su presencia.

- ¡No respondas mi pregunta con otra pregunta, Valentina Macarena!

Valentina respiró profundamente. Aquel era uno de los momentos más temidos por la rubia, no era así que pretendía contar sobre la separación para sus padres. Quería contar lo ocurrido, explicarles con calma, intentar al máximo evitar una discusión.

- No voy a tener este tipo de discusión contigo aquí.

- Respóndeme Valentina, ¿es verdad esa historia que Luis me contó? - Helena alzó el tono de voz.

- No sé hasta qué parte él te contó... - La rubia suspiró. - Pero todo es verdad, yo me voy a divorciar...

- ¿Cómo puedes ser tan estúpida, Valentina? ¿Eh? - Vociferó, balanceando la cabeza negativamente.

- ¿Cuál es tu problema? -Valentina habló en un tono totalmente tranquilo. - hablas como si yo fuera una adolescente. Tengo 26 años de vida, puedo tomar mis propias decisiones por separado y sin tu opinión, que no recuerdo haber pedido.

- ¿No entiendes que eso va a arruinar tu vida? Destruir un matrimonio como el que...

- Estoy embarazada. - Disparó desesperada, sentía ganas de llorar, pero no podía dejarse caer. - Estoy embarazada y mis hijos no son de Luis. Mis hijos son de otra persona.

- ¡¿Qué?! - Esta vez fue León quien dejó escapar boquiabierto. Helena estaba completamente sorprendida.

- Enhorabuena, ustedes van a ser abuelos de gemelos.

Luis tenía los ojos ligeramente abiertos, había sido sorprendido por la afirmación de la rubia, entonces se ahogó con la propia saliva. Él limpió la garganta y miró a la mujer boquiabierto,Valentina le devolvió una mirada fría.

- ¿Vas a tener gemelos? - El muchacho dirigió su pregunta a Valentina, su mirada cargada de dolor.

- Sí. - Como su mirada, su voz salió fría también. - Son dos, lo descubrí hace unos días.

Valentina se perdió en el recuerdo de la imagen del ultrasonido y el sonido de los corazones de sus bebés, algo tan pequeño que se había transformado en un amor que casi la sofocaba.

- ¿Cómo, Valentina? – La rubia pudo oír a la madre romper de nuevo. - ¿Estás embarazada? ¿De quién son esos niños?

- Eso no importa.

- ¿Por qué no importa? - Luis río irónico, estaba con el ego tan herido que buscaba cualquier motivo para ridiculizarla. - ¿Estás con vergüenza de contar a tu familia el tipo de persona con quién eres capaz de involucrarte?

- ¿Quién es el padre? - León preguntó también curioso.

Valentina lanzó una mirada furiosa y perversa a Luis. Sintiendo que en cualquier momento podría volar en el cuello del hombre. Su pecho estaba inflado, los puños cerrados y su respiración pesada.

- No hay padre. - Dijo de una vez. - Juliana es la madre de mis hijos. Ella es una chica intersexual. Esto consiste en una persona que presenta una anatomía reproductiva y sexual que no se ajusta a las definiciones de masculino y femenino. - Se formó aquel silencio desagradable. Helena miraba a la rubia como quien mira hacia una bacteria. Valentina suspiró sabiendo que necesita ser más clara que aquello. - Juliana es mi novia y ella tiene un pene. - Cruzó los brazos y continuó con la mirada fija en Helena, que quedó aún más sorprendida con la respuesta.