Capítulo 4: ¿Qué te pasó? Tu no eras así.

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Zhin Shen conocia el desarrollo de la trama y era muy consciente del profundo resentimiento de Zhao Yang hacia él. No sabía la razón exacta de ello, pero no había duda de Zhao Yang lo mataría. Incluso si se escondiera o escapara a los lugares más remotos, él eventualmente lo encontraría. Pero, ¿por qué no eliminarlo de una vez por todas?

No, Zhin Shen no podía simplemente matar al protagonista. Este hombre que estaba frente a él había demostrado ser capaz de enfrentar las adversidades de la vida. Él era el símbolo de la esperanza y la resistencia para su gente, y su sacrificio podría inspirar a otros a luchar por la libertad y la justicia. Era consciente de que había fuerzas más allá de Zhao Yang que buscaban su derrota y la de su reino. Eliminarlo podría significar que esas fuerzas se fortalecerán aún más, aprovechando el caos y la confusión que su ausencia causaría. Zhishen entendía que la supervivencia del protagonista tenía un propósito más grande que su mera existencia. Si lo mataba, la chispa de la rebelión podría extinguirse.

ZhinShen sabía que matar a Zhao Yang podría resolver temporalmente su problema inmediato, pero también perpetuaría un ciclo de violencia y venganza. Quería romper ese ciclo y darse a sí mismo y Zhao Yang la oportunidad de encontrar el perdón y la comprensión. Pero, ¿si lo que hizo Zhishen no tiene perdón? Además, si el personaje de Zhishen muere, ¿qué impacto tendría  su muerte en los otros personajes y en la narrativa general?

Su sacrificio serviría como catalizador para el crecimiento y la transformación, lo que llevaría a una resolución más profunda y significativa para todos los involucrados. En el fondo, ZhinShen creía en el poder de la redención y las segundas oportunidades. Entendió que el resentimiento de Zhao Yang provenía de un lugar de dolor. En lugar de recurrir a la violencia, quería encontrar una manera de reconciliar sus diferencias y, en última instancia, cambiar el curso de sus destinos entrelazados. Tal vez, al descubrir la verdad, podría encontrar una forma de redimirse y enmendar los errores del pasado. Por todas estas razones, ZhinShen decidió  con valentía y determinación,  encontrar una solución que no implicara la muerte de ninguno de los dos. Estaba decidido a cambiar el curso de la historia y desafiar el destino predeterminado. Haría lo que sea para seguir viviendo incluso si tiene que besar los muslos de protagonista para seguir respirando .

Cuando Zhi Zhen se adaptó a su nueva realidad, se dio cuenta del inmenso desafío que enfrentaría. Había reemplazado involuntariamente al protagonista, Zhishen, y ahora estaba agobiado por llevar a cabo su heroico viaje. Esto significaba enfrentar los mismos peligros, conflictos y enemigos que esperaban a Zhishen. Inicialmente, Zhi Zhen contempló aprovechar su nueva posición. Consideró usar su conocimiento de la trama y los eventos futuros para alterar la historia a su favor o incluso para eliminar amenazas potenciales antes de que surgieran. 

Después de divagar en sus pensamientos, su mirada cayó sobre Zhao Yang, quien se encontraba parado frente a él. Mirándolo detenidamente, el protagonista no se parecía en nada a la descripción que "el autor padre" le había dado a su hijo. En la novela original, el rostro del protagonista poseía una perfección casi irreal, con labios suaves y bien definidos, y una nariz recta y afilada. Su piel parecía suave y tersa al tacto, como la más fina seda, y su cabello oscuro y sedoso caía en ondas perfectas alrededor de su rostro. Este hombre parecía haber sido diseñado por las deidades para ser objeto de adoración. Su belleza era tan impresionante que nadie podía resistirse a su encanto. Su hermosura parecía trascender las leyes de la naturaleza. Su sonrisa era deslumbrante, con dientes blancos y bien alineados... ¡Era simplemente espléndido!  Pero ahora, se veía completamente miserable.

Zhisen se sentía consternado y enojado al presenciar de primera mano el dolor y la desesperación que consumían al protagonista. Una vez que Zhisen se había convertido en parte de la historia, comenzó a sentir una conexión emocional con el personaje.

-¡Vaya, vaya! -exclamó Zhisen con ironía y burla-. ¡Autor de mierda! ¿Qué le hiciste a tu hijo? Parece que el destino le ha jugado una mala pasada a este "dios de la belleza" que has creado. Ahora está aquí, frente a mí, hecho un desastre. ¿Dónde están sus labios suaves y bien definidos? ¿Y esa nariz recta y afilada que parecía esculpida por los mismos dioses? Parece que la realidad ha decidido jugarle una broma cruel. Y esa sonrisa... ¿dónde está esa sonrisa deslumbrante? Todo lo que veo ahora es dolor y desesperación en su rostro.

Zhisen se burló, sintiendo un placer amargo al ver al personaje tan lejos de su descripción original. Era una muestra de que la belleza exterior no siempre garantiza la felicidad interior. El autor había creado un protagonista perfecto solo para arrebatarle su esplendor y sumergirlo en la miseria. Era una ironía del destino que Zhisen no podía ignorar.

"La Veterana: ¿Domesticará a su Marido o Desatará el Caos?"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora