𝕯ía 05: Nagi posesivo/obsesivo.

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     —Creo que será mejor para ti si lo hablamos —ofrece Kunigami mientras comienza a vestirse.

     —No quiero hablar sobre eso —contesta Reo, imitando la acción del “héroe” y atando su cabello poco después—, ¿de qué serviría?

     —Podrías desahogarte, la has pasado mal por culpa del abandono imprevisto de Nagi.

     —Creo que ya me he desahogado lo suficiente en tu cama, Kunigami —gruñe molesto.

     Ante esto, el peli naranja no emite opinión alguna, él también tomó la ayuda de Reo para liberar estrés y, aunque intenta comprender y acompañarlo en su frustración, le es difícil si no quiere conversar sobre el factor que la ocasiona.

     Si bien las intenciones de Kunigami Rensuke son brindar apoyo moral a Reo, este último actúa con un trasfondo de por medio, poco o nada le interesa estar en compañía del chico, haberse acostado con él tiene un motivo que explotará a su favor.

     —Como sea, no tengo intensiones de pelear contigo.

     —Tus ojeras —inquiere el más alto, señalando el rostro de Mikage—, deberías dormir y comer más, te estás haciendo daño.

     —No es para tanto —repone Reo, tomando en manos su toalla personal—. Iré a... Darme un baño.

     El de cabellos violetas deja la habitación poco después. Sabe que él mismo es un manipulador, sin embargo, no se arrepiente en lo más mínimo, pues desea la atención de Nagi a toda costa, no le importa qué métodos inmorales deba tomar para conseguirlo.

     —Mierda... Ese tipo no sabe medirse en lo absoluto...

     Dice Reo, tallando su cuerpo mientras el agua lo recorre. Para su suerte, el hacerse notar no le toma mucha espera: han coincidido juntos en el cuarto de baño.

     —Barou realmente es un fastidio —argumenta Nagi.

     —No lo creo, él nos ayuda a limpiar diariamente —responde Isagi, en defensa.

     Reo tiembla al escuchar la voz del pelinegro por varias razones, la fundamental es... Porque Nagi lo escogió antes que a él y eso le cabrea, jamás había sentido tal humillación en su vida. Se contiene como puede, solo termina con su baño y sale de allí, atrayendo las miradas de ambos, en especial la de Seishiro, quien le clava sus enojados ojos en él.

     —Nagi, ¿Estás...?

     —Piérdete, Isagi —Ni deja terminar al azabache, se ha ido tras Reo.

     A Nagi le bastó con ver por unos segundos al chico para percatarse de notorias marcas en la sección de su cuello, conoce el cuerpo de Reo y lo que le gusta hacer con él, además, desde que se unió al equipo de Isagi no se ha acostado con el peli purpura, esto solo significa una cosa: Reo ha tenido sexo con otro integrante de Blue Lock.

     Al seguirlo, ambos se conducen al dormitorio en donde Reo y Kunigami se hospedan, por suerte, el peli naranja no se encuentra presente.

     —¿Cuál es tu problema? —interroga Reo, confrontando al albino.

     Pero Nagi no tiene tiempo para las excusas de su amante, así que acciona sin pudor alguno; sujeta los hombros del adverso y lo conduce a una de las paredes, la presión del agarre somete a Reo, quien es incapaz de moverse.

     —¿Quién fue, Reo? —los ojos de Nagi emiten furor.

     —¿De qué hablas? —aparenta Reo, intentando zafarse.

     —¿Quién fue? ¿Quién fue? ¿Quién...? —Pausa mientras sacude a Reo frenéticamente de atrás hacia adelante.

     —Cálmate, Nagi —aunque su plan emerge exitosamente, no esperaba una reacción así—. Me estás lastimando.

     —¡Si no me lo dices... Lo averiguaré! —él siente un vacío tremendo en el pecho y sus orbes carecen de luminosidad.

     —No seas idiota, además —empuja al más alto y desvía la mirada, realmente su plan cambió —, tú y yo no somos nada desde que me abandonaste... Nagi Seishiro.

     El oír su nombre completo en boca de Reo solo hace que se enoje más... Pero es un enojo extraño, como si se combinara con melancolía, penumbra. Es por eso que decide seguir insistiendo en saber quién le ha tocado y dejarle claro que Mikage es expresamente suyo.

     En el momento menos esperado, Seishiro corta la distancia entre ambos y guía sus fauces directamente al cuello de Reo, es verdad que no podrá borrar lo que otra persona hizo con su cuerpo, pero al menos le haría entender a ese tipo que Reo tiene dueño.

     Su lengua acaricia poco después el producto de la mordida; es una herida no muy grave, aunque llega a brotar algo de sangre de la misma. Nagi le ha encarcelado con sus fornidos brazos, no le dejará ir, y eso... Es lo que Reo quería desde un inicio.

    —Reo es mío —tras cada segundo, va comprimiendo más el enlace de sus brazos.

     —Na-Nagi...

     —Mataré a cualquiera que se atreva a tocar a Reo.

     —Das mucho miedo —tras pensarlo un poco, decide corresponder el abrazo, tiembla en los de Seishiro, le encanta recibir este tipo de atención, aunque sea muy cuestionable el actuar de su ex novio.

 -'ˏ 𔘓◝ 𝒩agiReo𝒲eek ❪ 2𝟎23 ❫.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora