Nada igual

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Y desde que no pude sentirme cómoda
con todo aquello que soy
nada fue igual.

cuando preferí ocultar lo que no te gustaba
para resguardarme de la pelea,
y ahora aquellas partes de mí
que más segura me hacen sentir
viven en la sombra de tu rechazo,
Ya nada es igual.

No te entiendo por completo,
pero comprendo que el hecho
de jamás haberlo vivido
hizo que me condicionaras
a lo que te parecía correcto.

Y ya nada será igual para mí
si sigo guiándome por tu crítica.

Veintidós; veintitrés. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora