El Potter equivocado

13

"Los Arrows tienen un partido el sábado, ¿puedes venir?" preguntó James mientras ambos se vestían para el día.

"Desafortunadamente, trabajo todo el sábado". Scorpius dijo con el ceño fruncido.

"Tal vez pueda pasar más tarde entonces, ¿sí? ¿Alrededor de las 8?" preguntó James.

"Eso funcionará, sí". Scorpius estuvo de acuerdo.

"Perfecto. Aunque también espero verte antes del sábado." dijo James. Cuatro días era demasiado tiempo para esperar.

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Era jueves y James pensó que haría su camino hacia Scorpius, para sorprenderlo. Scorpius ya debería estar fuera del trabajo, pensó. James llamó a la puerta. Scorpius respondió luciendo un poco sorprendido de verlo.

"¿James? Esto es una sorpresa." dijo Scorpius.

"Estaba en el vecindario, así que pensé en pasar". dijo James. "¿Puedo entrar?"

Scorpius vaciló, pero abrió más la puerta y asintió. "Supongo."

James entró, se abalanzó sobre la boca de Scorpius una vez que cerró la puerta, presionándolo efectivamente contra la puerta. Scorpius dejó escapar un pequeño grito ahogado, pero aun así se apresuró a devolverle el beso. James se presionó contra Scorpius y comenzó a mover sus caderas, provocando un gemido del rubio.

James se separó de Scorpius para gruñirle al oído. "Vamos a llevar esto al dormitorio".

"No. Eso es- No haré eso. Esa es una línea que no cruzaré, lo siento." Scorpius protestó.

James tuvo que luchar para no poner los ojos en blanco. "Bien, te llevaré contra esta puerta, como una perra". siseó.

James sacó su varita y con magia quitó la molesta ropa del rubio. Luego se deshizo rápidamente de los suyos. No perdió el tiempo colocando su pene en la entrada de Scorpius y empujándolo.

Scorpius solo gimió en respuesta cuando James se hundió completamente en él. James luego se retiró, solo para empujar hacia adentro rápidamente. "Está bien. Puedo ayudarte. Puedo ayudarte a ser libre ". Luego enfatizó su punto de golpear su próstata, lo que hizo que el rubio gritara. James marcó un ritmo brutal. James luego pellizcó el pezón de Scorpius mientras golpeaba su próstata.

"Mierda." Gimió Scorpius sintiendo que no iba a poder aguantar más.

James sintió que se acercaba, por lo que entró y salió de Scorpius de manera errática hasta que se liberó dentro de él. James estaba a punto de masturbar a Scorpius cuando se dio cuenta de que el rubio ya estaba suave y su semen estaba entre ellos. No estaba seguro de cuándo había llegado, pero no estaba sorprendido.

James salió de Scorpius y abofeteó su culo lleno de semen con aprecio. Scorpius simplemente se sonrojó en respuesta.

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James estaba en la cima del mundo, habían vencido a los Tornadoes. Se había pasado un buen rato posando frente a las cámaras respondiendo preguntas de los periodistas y firmando autógrafos. James estaba ansioso por llegar a la celebración, sin embargo, no con sus compañeros de equipo. 

"Lo siento, muchachos y damas, tengo otros planes para celebrar. Ya tengo una cuenta abierta en el pub, ¡bebidas por mi cuenta!"

Su equipo lo vitoreó y todos bajaron al pub. James, mientras tanto, se apareció en el piso de Scorpius. Scorpius abrió la puerta y le sonrió. "¡James! ¿Cómo te fue?" El rubio le abrió más la puerta a modo de invitación.

James entró en el piso. "¡Brillante! ¡Ganamos!"

"¡Felicitaciones! ¿Quieres un trago? Tengo-"

James lo interrumpió y lo presionó, "Lo único que quiero es mi recompensa. Estoy aquí para reclamar mi premio".

Scorpius tragó saliva, "Está bien. ¿Y qué sería eso?"

"Tú. En el dormitorio. Quiero reclamarte en la cama tuya y de Albus." James gruñó.

"James yo-"

"No puedes. Lo sé." James terminó por él, "Pero aquí está la cosa. No te estoy preguntando. Te lo estoy diciendo. No sé de dónde te sale pensar que eres el que manda, pero no lo haces. Así que tienes dos opciones.  Puedes desnudarte y subirte a la cama abriendo las piernas muy bien para mí. O puedes elegir no hacerlo y me iré a otra parte esta noche. Voy a mear, eso debería darte suficiente tiempo para que tomes una decisión". dijo James. 

Luego se bajó de Scorpius y se dirigió al baño. Tal vez fue injusto de su parte decirle eso, pero James tenía que mantener el control. Tal vez él estaba a cargo de Albus, pero ciertamente no era así como iban las cosas aquí.