Consigliere (Beastars Fanfic)

Epílogo: La calma antes de...

Nota del autor: ¡Sorpresa! (Bueno, casi) esto debería ser lo último antes de la secuela, espero que lo disfruten uwu

El sonido de las llaves en la puerta fue lo único que ese bosque escuchó en días. Al encender las luces, vieron la pequeña pero cómoda cabaña por dentro, Legoshi fue el primero en entrar, emocionado por iniciar sus vacaciones en aquel tétrico pero tranquilo lugar del mundo.

Louis no estaba tan convencido, si algo sucedía no tendrían ayuda más allá de los guardabosques y aún así estaba a varios minutos de distancia. A pesar de eso, lo primero que descubrió en este viaje fue que ver a Legoshi contento le traía… satisfacción.

-Este lugar es increíble- La plata interior tenía una estufa y un sofá, además de una pequeña cocina, el baño estaba afuera en una pequeña caseta, que por suerte estaba limpia.

Al subir las escaleras se hallaba el dormitorio, una cama de dos plazas y una litera, además de un televisor y el teléfono. Ambos dejaron sus maletas en el suelo y procedieron a descansar un rato.

-Ah… me alegro que te guste- Se quitó los zapatos y el abrigo, Legoshi notó algo extraño en uno de sus pies.

-Oh ¿Louis?-

-¿Si, lobito?-

-Tu pie… no sabía que tenías un tatuaje-

Louis quedó quieto, congelado al recordar su maldición. Su mirada se entristeció y dejó salir y un suspiro de la misma emoción.

Legoshi supo que no era una pregunta para hacer ahora y trató de cambiar el tema, solo que no halló nada para decir, no era el mejor con las palabras.

-Es… una marca. Te lo contaré algún día- Louis se levantó y caminó hacia el lobo -No quiero hablar de eso ahora… disfrutemos nuestras vacaciones- Sonrió. El ciervo trató de encender la estufa mientras Legoshi de cuclillas a su lado.

Al lograrlo, volvieron al sofá y se acurrucaron frente al fuego.

-Cada vez que estamos así, puedo sentir algo raro correr por mi cuerpo. Una parte de mi me pide que huya mientras otra quiere quedarse junto a él. No lo entiendo ¿Serán mis instintos de presa?- Meditaba mientras recostaba su cabeza sobre el lobo, intentando no lastimarlo con sus cuernos. -No es una sensación molesta, de hecho apenas la noto, pero aún así se me hace curioso.-

Legoshi lo tenía abrazado, feliz de pasar el rato junto a su ciervo favorito. El sonido de su respiración y el fuego era lo único que se escuchaba en la cabaña.

El lobo se durmió primero, aunque Louis no tardó mucho más. Quedaron así hasta ser interrumpidos por el teléfono del ciervo, el cual no planeaba atender hasta que vio quien llamaba.

-Padre-

Como con casi todo en su vida, Oguma sabía de su escapada al bosque.

-Louis ¿Cómo van tus vacaciones?-

-¿Qué quieres?-

-Solo ver como están tú y tu novio. Recuerda que de ahora en más ambos son una inversión para mi y para la compañía- Louis odiaba ser tratado como la propiedad de alguien más, solo lo toleraba por la herencia que recibiría.

-Pues estamos bien- Cortante, quería sacárselo de encima.

-Me alegro. Espero disfruten sus vacaciones- Cortó la llamada y Louis volvió con Legoshi, este ya se había levantado al sentir que Louis no estaba junto a él.

Sin decir nada le dio un beso que duró un buen rato, sintió sus colmillos que tanto le gustaban mientras lo abrazaba y eliminaba el espacio entre ambos. Pasó una de sus piernas por detrás de las del lobo, atrapandolo junto a él. Podía sentir su cuerpo pegado junto al suyo, ese suave pelaje de carnívoro, el bulto en sus pantalones y sus músculos a los que últimamente entrenaba.