Capítulo 59: Una mentira es la verdad.

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Hace once meses

Estaban en la puerta esperando a Naruto. En su carrera de ninja, Jiraiya tuvo muchos años en misiones extendidas. La idea de dejar Konoha por un año más o menos no le molestaba en absoluto. Especialmente no si finalmente llegaría a lidiar con ese bastardo al que una vez había llamado amigo y compañero de equipo. Mirando a su aprendiz notó que Sasuke estaba tan relajado como él. Desde que le dijeron que iría a una misión extendida con Naruto, Sasuke no había pronunciado una sola palabra de protesta.

"Sabes, Sasuke, estoy orgulloso de ti". dijo Jiraiya. "Aunque hemos estado en muchas misiones, nunca has estado fuera de la aldea más de un par de meses. Para ser honesto, medio esperaba que fueras al Hokage y le exigiera que no fueras parte de esto. "

Los labios de Sasuke se torcieron en esa pequeña sonrisa de suficiencia que siempre usaba cuando pensaba que sabía algo que tú no sabías. "¿Qué, y perder la oportunidad de matar a Orochimaru? Si hago eso, seré una leyenda ninja y el nombre Uchiha se volverá aún más glorioso. Por supuesto que iré".

Eso era cierto. Jiraiya sabía muy bien cuánto se preocupaba su estudiante por su reputación. Pero sospechaba que había algo más. "También me alegro de que no tengas problemas para estar con Naruto durante tanto tiempo".

"Puedo aguantarlo si eso significa que puedo lograr mis objetivos".

Jiraiya asintió, esa era una respuesta adulta. Tal vez los tres podrían arreglárselas juntos después de todo. Cuando se acercaban las ocho en punto, finalmente vieron a Naruto acercándose con su atuendo negro normal y su mochila. Jiraiya sonrió ampliamente cuando vio que la encantadora Moka había venido a despedirlo. Estaba especialmente feliz dado que ella estaba vestida con un vestido rojo fuego que ni siquiera llegaba a la mitad de sus muslos. También reveló bastante de su amplio escote. No se dio cuenta de que había comenzado a babear hasta que sintió una intención asesina proveniente de Naruto.

"No la mires de esa manera maldito pervertido." Naruto le gruñó.

Moka parecía divertido. "Está bien, Naruto-kun, no me importa". Ella envió una mirada muy fría en dirección a Sasuke. "Mientras solo mire".

"Tenemos que irnos", dijo Sasuke a nadie en particular.

"Entonces vámonos, no es mi intención retrasarte o ralentizarte". Mientras hablaba, se giró ligeramente para revelar que tenía una mochila mucho más pequeña.

"¿A qué diablos crees que estás jugando?" exigió Sasuke. "Este no es un viaje de fin de semana; es una misión de rango S. Será peligroso y nadie tendrá tiempo de cuidarte".

Sonriendo, de repente retrocedió y golpeó el suelo con el puño, sorprendiendo a todos, incluso a Naruto. Cuando la tierra tembló, todos se vieron obligados a retroceder. Cuando el polvo se disipó, había un cráter de diez pies de profundidad en medio del camino.

"No necesito que nadie me proteja. Puedo cuidarme solo". Habló mientras miraba directamente a Sasuke. "Deberías saber eso a estas alturas".

Sasuke gruñó y sus manos parecieron temblar un poco.

¡No lo creo! pensó Jiraiya. Da casi tanto miedo como Tsunade, solo que con pechos mucho más pequeños. "Eso es muy impresionante", admitió Jiraiya. "Pero me temo que solo los ninjas de la hoja pueden participar en misiones para el Hokage. Eso es aún más cierto cuando se trata de una misión de rango S. Lo siento, pero no puedes venir con nosotros".

Ella inclinó un poco la cabeza y sonrió. "¿Y cómo planeas detenerme?"

Jiraiya miró hacia el cráter y vaciló. La única vez que estuvo cerca de la muerte fue cuando Tsunade lo atrapó mirándola. No le gustaba la idea de tratar de forzar a Moka a nada.

El Verdadero MonstruoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora