Sinfonía 26

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Doménico.

Estaba algo desorientado, aun no entendía del todo por que estaba allí. Aldy quiso darme una vaga explicación de ello, pero no estaba con ánimos de escucharla. Simplemente, no quiero entenderlo.

Entender como fui capaz de cometer esa locura, de quitarle esa inocencia a Alexandria que tanto quise proteger y luego irme. Como si nada. Quizás solo estoy exagerando, me digo, pero no es valido. No lo es por que ella es muy frágil y yo solo la estoy lastimando. Ella me quiso demostrar un montón de veces que era fuerte, con una botella de alcohol en la mano, pero en cualquiera de la situaciones que ella vivió, ¿quien no lo seria?.

Aun no podía creer que llevara un mes entero aquí en California, en ese mes recibí mas de cuarenta llamadas de Alexa, cinco mensajes de voz y un solo mensaje. El definitivo, que me dejo preocupado.

Es por eso, que ahora estoy con Aldanna en algún café confortable frente a la costa de la hermosa California. Era un café temático de la saga de libros de J. R. R. Tolkien, El Señor de Los Anillos decidiendo si volver o si no.

Estábamos en una de las mesas de afuera, ya que el café estaba totalmente lleno adentro, por el frío insoportable que había, pero eso no impedía que me tomara mi Moca-Frodo de la Tierra Media, y que Aldy se tomara su café simple y se comiera su torta de calabaza y miel. Mi celular volvió a vibrar y Aldanna puso los ojos en blanco, tome mi celular a ver quien era, para mi desgracia, era Armany.

-Jodeh, tío, ¿cuando pensabas contestarme?. Mira que a diferencia del cliché americano del crédito de celular interminable, yo no cuento con eso, jodeh. Aparte tienes otra linea y me come el hígado que me dejes colgada, cabrón.- me grito Many, haciendo que alejara "ligeramente" el teléfono de mi oído, causando que Aldy se riera.

-Ya bájale, ¿queres?. Me acabas de destrozar el tímpano, oye.-le espete.

-Calla y escucha.-me replico.-Alexandria tubo otra decaída, y fue.... Peor que la de Lionel, Doménico.-su tono de voz cambio repentinamente, haciendo que me tensara.

-¿Que paso esta vez?, ¿ella esta bien?, ¡anda!. ¡Dime que pasa!.-le exprese asustado.

-Domé...-suspiro, como si le pesara lo que fuera a decir.-Ella esta internada.

~*~

No lo dude... Solo lo hice, tenia mi boleto de avión en la mano listo para entregárselo al tipejo del avión al cual me estaba subiendo. Me iría a Aspen, infortunadamente sin Aldy, ya que tenia que arreglar unos "asuntitos" en torno a la casa de su padre aquí en California, donde nos estábamos quedando.

Soy un imbécil, enserio lo soy. Pensé que alejándola no le haría mas daño, y eso es exactamente lo que hago. Según lo que me contó Many, Alexandria fue a una licorería y compro dos litros de ron y un litro de wiskey, y se los tomo encerrada en su habitación. Luego le vino un ataque de ira y rompió todo lo que tenia a la vista en su cuarto, despues rompió una botella contra la pared, causando que se le incrustaran pedazos de vidrio en la mano y muñeca.

Su padre no se dio cuenta de que estaba con tres botellas de alcohol por que le dio la escusa de que iría a comprar unas cosas para ella y obviamente trajo consigo las bolsas de lo que había "comprado". El no se dio cuenta de que Alexandria estaba inconsciente y desangrándose hasta que fue muy tarde, ya que ella solía ponerse con la música a todo lo que da, y obviamente no se oía nada. Cuando Sean trato de abrir la puerta, por que le había gritado a su hija para que bajara la música, ya que estaba leyendo, subió para ver por que no acataba la orden, por que sospecho que su hija no bajara la música todavía.

Golpeo frenéticamente esperando respuesta, hasta que en un intento desesperado a que le respondiera, rompió la puerta, encontrándose con Alexandria en un charco de sangre. Cuando llego la ambulancia, y la asistieron, le dio un paro al salir de la casa, ya que el nivel de alcohol en su sistema, mas el hecho de haber perdido una cantidad monumental de sangre hicieron que se debilitara al punto de causar un paro, por suerte lograron salvarla.

The Bittersweet Symphony ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora