Sinfonía 2: Extraña coincidencia.

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Baje del auto como una centellea, estaba ansiosa por ver a mi padre. Demasiado ansiosa.

-¡Oye! escuincla, ve despacio- gritó Silvanoprah en medio de la gente mientras yo corría.

-Vete al demonio, ¡vino mi padre!.-exprese alegremente.

Yo y mi padre nos llevamos de puta madre, siempre confía en mi, cuando el esta me siento protegida, Silvanoprah no puede ni debe hacerme nada, ya que la ultima vez que lo intento; mi padre la hizo comer barro, literal. Yo estoy en contra de la violencia hacia la mujer, pero, he de admitir que mi "madre" se merece una acomodada de esqueleto.

Entre tanto pude visualizar la silueta de mi padre, tan radiante como siempre.

-¡Padre!, ¿como has estado?- pregunte efusivamente, abrazándolo

-Muy bien hija- se aparto de mi- ¿y tu? - la sonrisa que tenia se le borro de inmediato, mmmm problemas, problemas everywhere....

-Bien.-le di una sonrisa a boca cerrada, que pareció mas una mueca.

Se acerco a mi oído y dijo -Me cuentas en casa, y yo lo arreglare.

-Okey, bienvenido.-volví a abrazarlo

-Gracias hija.-me dio un beso sonoro en la mejilla y paso un brazo por mi hombro.

-No es nada.-sonreí y seguimos avanzando.

Mi padre saludo a Silvanoprah de una manera fría, ¡al fin se esta haciendo justicia!, decía yo en mi fuero interno. Esa perra ahora me las pagaría, y yo estaría en mi cuarto con mi laptop escuchando cada detalle.... ¡ja!

~*~

-Silvan, no es la primera vez que pasa, ¡tiene moratones por todo el cuerpo grandiosa puta!-sentí que le gritaba mi padre a Silvan.

-¡Ella se los ha ganado Sean!, no me culpes por defenderme...-¿QUE?, no puede estar hablado enserio.

-¿Defenderte?, ¿Enserio Silvan?, ¡¿ENSERIO?!; Es una pobre niñata de 18 años, y tu no le tienes piedad siquiera. Pero esto que hiciste, no se quedara así; no, para nada créeme.

-¡Sean compréndeme!- dijo sollozando- He tratado de reparar el puto error que cometiste con esa perra hace 18 años.

-¡Y NO ME ARREPIENTO!-grito mi padre.

Luego de eso escuche como la golpeaba como a un costal de papas.

Quede petrificada. O sea, Silvan ¿había dado a entender que no era su hija, y que por eso me trataba de esa forma tan cruel?. Simplemente, petrificada. Después de salir de mi trance, me puse a mirar una peli, en realidad mi peli favorita, Whip It, con el amor de mi vida Landon Pigg. Después de pasar las dos putas horas babeando frente a la pantalla decidí ducharme e ir a acostarme.

~*~

-Hija, despierta- dijo mi padre con voz melodiosa- hija, ya esta pronto el desayuno, levántate.-pico mi mejilla levemente.

-Ya voy padre- conteste desperezándome- ¿que hora es?

- 7:30 imperfect star.-respondió mi padre con ese apodo que me puso de pequeña.

-¡Oh por Dios!, ¡Es tardísimo!- abrí los ojos de inmediato y salte de la cama a ducharme, para luego vestirme e ir al estudio a ensayar, pero mi padre me freno.

-¡Hey!, ¡hey!, tranquila, ya no tendrás que ensayar los fines de semana. Ya he platicado eso con tu madre ayer.-me dio una mirada alegre.

-¿Que?, ¿enserio?, ¡gracias!.-lo mire sorprendida y lo abrace.

-No es nada, te dejo así te cambias y bajas a desayunar.-me soltó y fue hasta la puerta.

-Esta bien.-luego de eso, la abrió y salio.

¿Como describiría el desayuno?, de puta madre, lo se, es que cuando esta mi padre, suelo soltarme y decir muchas malas palabras. Pero volviendo a la realidad, es que Silvan estuvo callada todo el maldito desayuno. Tanto así que mi padre tubo que sacarme tema de conversación, y lo que es peor; me pregunto como andaba de chicos. Nivel de vergüenza: 100 %

~*~

Al final de el día mi padre y yo decidimos hacer una salida padre e hija, como en los viejos tiempos. Salimos de shopping, fuimos a la clásica pizzería 7Fold (si lo se, es raro), y mas tarde al cine. Lo mas extraño de todo esto es que, tuve la asquerosa y extraña coincidencia de encontrarme al chico del teatro, en pasillo de los baños del cine.

-No puede ser, ¿que haces tu aquí?- le observe con incredulidad.

-El baño es publico, y también es una casualidad que siempre nos encontremos en un baño. Es una especie de coincidencia asquerosa.- sonrió con sorna

-Si, supongo.-dije algo sorprendida.

-Veo que se ve mas alegre bella dama herida.-me escaneo con la mirada.

-¿Otra vez con los apodos?. tengo nombre Doménico.

-Lo se, es que ese apodo te queda bien, va mucho contigo.-explico.

-¿Sabes que apodo va excelente contigo?-le di una mirada de muerte.

-¿Cual?- pregunto sonriente.

-¡Trottel!-respondí en alemán, sip, sabia hablar lo, de hecho se hablar varios idiomas.

-Ich sehe was ja haben sie gehirn, Alexa.- me dijo con el rostro impasible en un alemán casi perfecto, exceptuando por la parte en la que tenia acento americano.

-¿Sabes alemán?.-lo mire sorprendida.

-De hecho, viví 4 años en Berlin.-sonrió

-Oh, no lo sabia.-acote mirándolo por unos segundos.

-De hecho, no sabes casi nada sobre mi. Al menos, ¿entendiste lo que dije?-pregunto.

-Si, creo.-conteste.

-Bueno bella dama herida, yo he de partir. Quizá un día de estos, tengamos otra asquerosa coincidencia.-se fue alejando hasta el final del pasillo.

-Bueno, adiós.-lo salude con la mano.

-Buenas noches.-me guineo un ojo.

~*~

Traducciones:

Trottel: tarado/a.

Ich sehe was ja haben sie gehirn: veo que tienes cerebro.

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N/A:

We we we, he aqui el segundo capitulooo! ¿Que opinan de Doménico?, yo creo que es alguien muy misterioso *guiño guiño* XD, we ¡Saludos!. Oh casi lo olvido FOTO del papi de Alexa.

#Intheshadows

The Bittersweet Symphony ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora