cárcel

un amor sangriento parte 1

Los días pasaban y jimin era más a pegado a mí, también se relacionaba con los demás niños, jugaban, reían, se ayudaban entre si, tal vez la amabilidad de jimin hacia que todos quisieran estar con él.

En cambio yo me la pasaba concentrado en los libros, cada libro era un mundo nuevo por conocer, los demás niños no me invitaban a jugar ni tampoco compartían conmigo, pero eso a mí no me importaba, jimin siempre trataba de hacerme sentir bien, aunque yo era muy serio, él siempre se la ingeniaba para ser que mi expresión cambiará cambiará por una muy corta y leve sonrisa.

Jm: ¡jungkook!.

El pequeño rubio entró a la celda corriendo muy emocionado, yo lo volteé a ver mientras se reponia energías para tomar aire y decirme lo que me quería decir.

Jk: ¿si...?

Jm: espera un momento, creo que no debí correr tanto.

El pequeño se sentó aún lado de mi cama, y tocó su pecho al mirarme fijamente.

Jm: el abogado vino a ver y me dijo que mi hermano vendrá a ¡¡visitarme!!.

Jk: oh, vaya cuanta moción, calmate.

Jm: ¡¡no puedo!!, por fin veré a mí hermano, pensé que había roto su promesa.

Estiró sus brazos hacia riba y se acostó en mi cama.

Jk: bien eso es bueno.

Jm: ¿qué si es bueno?, es buenísimo.

Solté una pequeña risa y me acosté junto a él mientras mirábamos hacia riba, el soltó un suspiro.

Los días pasaron y Max fue liberado, en la celda lo quedábamos jimin y yo.

El día de visitas había llegado, jimin estaba nervioso no paraba de caminar en círculos, y mordia sus uñas.

Jk: calmate vas hacer un agujero en el suelo.

Jm: no puedo estoy realmente nervioso.

Jimin saco sus dedos de su boca y me miro fijamente.

Jm: sabes, aveces me cuesta creer que eres menor que yo.

Jk: ¿eh?.

Jm: si es que tu forma de ser es como la de un niño grande.

Jk: mi cuerpo es chico pero mi mente no.

Jm: Urg, ¿vez lo que digo?.tu eres u.......

Las palabras del pequeño rubio fuero interrumpidas cuando un guardia entró.

Gd: Park jimin, tienes visita.

Jm: bueno kook desea me suerte.

Salió de la celda seguido del guardia que lo guardaba.

Horas después la visitas habían terminado yo me encontraba organizando mi camarote(cama de celda), cuando jimin entró.

Jk: ¿como te fue?.

El pequeño se sentó en su cama y con la mirada fija en él suelo.

Jk: ¿tu hermano no vino?.

Jm: ¿mmm?, ah...., no, si, si vino.

Jk: y entonces cuál, ¿es el problema?, pensé que estarías feliz.

Jm: lo estoy, estoy feliz de ver a mi hermano, kook mi hermano me dijo algo y......

El pequeño levantó la mirada y la fijo en mi

Jm: y quiere que me escape.

Jk: ¿que?.