⁀➷ 𝘛𝘦𝘭𝘭 𝘮𝘦 𝘢𝘭𝘭 𝘵𝘩𝘦 𝘵𝘩𝘪𝘯𝘨𝘴 𝘺𝘰𝘶 𝘸𝘢𝘯𝘯𝘢 𝘥𝘰
ミ! ooc, beta x omega, alteración del tiempo.
𖦹︎ Los personajes no me pertenecen, créditos a su autor.
𖦹︎ Toda copia queda prohibida, cualquier adaptación tiene que ser consensuada...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Shoto comía si límites y lo comprendía luego de estar lejos dos días, con personas poco conocidas pero de suma confianza aun que le cueste admitirlo. Y puede que sea poco tiempo cuarenta y ocho horas pero en ese tiempo Yagi y él pudieron arreglar sus problemas y dudas, acordando conocerse todavía más, antes de iniciar algo juntos.
Apreciaba el toque en el cabello bicolor de su hijo y como tanto el beta como el bebé tenían una lucha campal de miradas más enserio desde el punto de vista de Shoto que de Toshinori, juraba que el pequeño quería dar a entender que él era solo suyo y no estaba dispuesto a compartir a su mami o quizá sólo un poco con su dada.
Por qué hasta un ciego se daría cuenta de que su hijo aceptaba al blonde como su figura paterna y era obvio después de crecer sin una pero con el beta a su lado casi todo el tiempo.
Jadeó un poco cuando las manitas de su bebé le apretaron de más el pecho, aun le dolía. Algun bastardo de por ahí no había perdido la oportunidad de pegarse como sanguijuela al primer instante de valentia.
Toshinori lo vió con las mejillas coloradas cuando lo fulminó con sus penetrantes ojos azules. Fuera malo o no, por su culpa decidió cortar la hora de merienda de Shoto y como lo espero su ceño estaba igual de fruncido que el suyo, eso significaba que no estaba de buen humor y no lo estaría por otro rato más.
一 Oh vamos... no me hagan esto.
Soltó el rubio, con culpa, lamentándose y tomando entre sus brazos al bebé bicolor para lanzarlo en varias ocasiones hacia arriba, sacándole carcajadas que después de convirtieron en un terrible vomito.
一 ¡Tarado!
Gritó Todoroki riéndose en su cara, aun que ahora la habitación olía a leche cortada y ciertos hombrecitos debían de tomar una ducha en dónde también estaría invitado.
Juntos con un poco de vergüenza como todas sus últimas interacciones, estaban sentados dentro de la bañera, con el vapor rodeando sus cuerpos y el agua golpeando sus rostros por los chapoteos felices que el bebé daba, amaba el agua y de eso no había duda.
一 Alguien parece no estar tan enojado ahora.
一 Ahora
Quizo pegar su rostro al cuello del más alto pero se detuvo repitiéndose que acciones como esas y viniendo de él eran demasiado precipitadas, el cariñoso era Toshinori y todavía sentía muy repentino algo como eso por más privados que estuvieran del mundo.
Toda su burbuja se rompió cuando su celular comenzó a sonar, la primera vez refunfuñó que no saldría así fuera muy importante, la segunda vez colmó su paciencia y poniéndose su bata salió dejando a su cachorro en manos del beta.
Era un número desconocido al cuál le respondió simplemente por ver si no era una broma de mal gusto que había interrumpido su momento de relajación. Tomando en cuenta eso, como plan principal dejo el teléfono en voz alta sin contestar nada hasta oír una voz femenina del otro lado.
Con una sóla palabra había quebrado todos sus sentidos.
一 ¿H-hola?, ¿Enji, eres tú?
一 Rei...
Soltó luego de unos segundos de incómodo silencio, sin saber que decir luego de confirmar eso.
一 La misma... hmmm
Toda esa charla estaba deparando a algo ridículo entre balbuceos si no hacía absolutamente nada, por dios con quien no debería se comportaba de manera apropiada y quien realmente lo merecía sólo obtenía una faceta arisca, era un idiota, uno grande.
一 Lo siento si me escucho grosero, pero, ¿qué necesitas?
Escuchó la maija del baño ser abierta y ver a un rubio salir con Shoto a medio dormir sobre su hombro, algo húmedo aún, cosa que lo preocupaba pues en cuestión de tiempo podría cachar algun resfriado debido al fresco de la hora en que se encontraban.
Todo dió un giro al entender las señas de Yagi que le decían que él cambiaría a Shoto, que siguiera sin preocupaciones su conversación.
一 No yo sólo... primeramente saber cómo está el bebé y que, bueno, Fuyumi ha insistido en verte, ella y Natsuo estan enfermos. El doctor dice que necesitan las feromonas de su madre para mejorar.
Lastimaba su orgullo saber que quizá vería a sus hijos un momento y simplemente sería por el compromiso que llevaba ser su madre. Y en verdad extrañaba tanto a sus gemelos que seguramente ahora eran todos unos cachorros salvajes con sus colmillos creciendo o al menos en camino, con sus cinco años a flor de piel.
Podría también enterarse de como les habría ido en el jardín de niños, saber si su hija ya no tiene que estar detrás de su rudo hermanito todo el tiempo, si ya había conocido más personas para agrandar su círculo social y cosas muy mínimas que parecen insignificantes o tontas, pero moría por saber.
一 Lo que sea por mis hijos, dame hora y lugar.
La alfa le dió las indicaciones y estaba hecho, el jueves conocerían por primera vez al pequeño Shoto así como volvería a ver a sus niños, no había emoción que describiera como se sentía, su única reacción fue dejarse caer de bruces al colchón y derramar lágrimas en silencio.
一 Oh cari- ¿cariño, sucede algo?
El blonde se acercó hasta ponerse en cuclillas de frente a su rostro, asustado por verlo llorar desde el marco de la puerta.
一 Dios... no, no mi amor, no llores y tranquilizate.
En esos momentos la mente de Toshinori taladraba fuerte a su corazón, siendo una de tantas donde deseaba ser un alfa y no un simple beta, por qué palabras ordinarias de consuelo no serían nada, nunca podría bañarlo de su olor, pero eso no debía afectarlos en nada... o ¿sí?
No importa, serían su mayor confidente y ahora esperaba ser un soporte para el pelirrojo hasta que este decidía contarle sobre la llamada y por qué era un asunto de índole tan sentimental.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Hello, la chamba no me deja hacer nada, pero después de un mes aquí estoy, esperando como siempre que les guste.