moon & sun. [settphel]

he makes me feel loved.

''Bebé, vamos, hueles mal, necesitas una ducha'' Settrigh acariciaba el negro cabello de su amante, mientras que Aphelios reclamaba con sonidos, estaba demasiado cansado, las misiones y su deber lo tenían en un pequeño, gran, burnout, pero no importa qué pase, sabe que el azabache hará de todo para cumplir su destino, incluso si eso significa un desgaste físico y mental.

Una idea se le pasa por la cabeza.

''Sé que estás cansado, dejame ayudarte ¿sí?''

Los ojitos negros de él lo miraban curioso, y era una vista tan maravillosa, que le gustaría sacarle una foto y guardarla para siempre, Aphelios en su pecho, descansando. Perezosamente, éste señala con sus manos, ''¿Cómo?'', genuinamente, ni usar lengua de señas podía, su cuerpo se sentía como fuera gelatina, o como si algo pesado le hubiera caído encima.

''Deja que tu cabeza deje de pensar, pastelito, solo confía en mí''

''Lo hago'' Señas lentas y cortas, pero que significaban tanto a la vez.

''Entonces déjame a mí el trabajo''

Nunca pensó que estaría allí, siendo tan... doméstico con alguien, toda su vida pensó que se dedicaría a la arena, ¿pero esto?

Cuidar de alguien, amar a alguien, dejar que su corazón sangrara junto al de alguien, que su mente deje de pensar un rato, se sentía tan bien, tan bien como las peleas, y piensa que es una extraña comparación, pero no puede evitarlo, si hay dos cosas que ama, son primero sus seres queridos, y luego las peleas.

Es extraño, tan extraño, tan ajeno a él, pero tan natural.

¿Quién pensaría que el grandulón de Settrigh sería un romántico empedernido? 

Allí estaba, sentado en un pequeño taburete, mientras Aphelios lo miraba somnoliento, su cabeza recostada en la cabecera, su cuerpo débil recostado en la bañera, y con cariño derrochando en aquellos ojitos que tanto ama.

Estaba desnudo, el agua tapaba la mitad de cuerpo, y la forma en la que su corazón late, lo hace sentirse vulnerable y desnudo de igual manera, la forma en la que lo miraba con una sonrisa, lo deja expuesto, como si él supiera todo lo que Settrigh estaba pensando, lo que siente, y cómo lo ama.

Tiene el corazón, la mente, el cuerpo de Aphelios en su manos, y hará de todo para protegerlo y cuidarlo.

''...Gracias''

Una simple palabra que lo hace querer llorar, ''Shh, no hables, sé que te duele'' Y a veces desearía quitar todo lo malo de la vida de Aphelios, que su garganta ya no duela, que su mente ya no pida ayuda a gritos silenciosos, que no hayan más marcas de guerra en su cuerpo.
Pero sabe que no es posible, y tan solo espera que esto sea suficiente para hacerlo aunque sea, un poco feliz.

Espera ser suficiente.

Sus párpados caen, mientras Settrigh lava su cabello, dejando caer su mano al agua para sacar la espuma, y luego acariciar su mejilla, y piensa que no podría describir a su Aphelios en solo una palabra.
Lo más cerca con lo que podía hacerlo, era compararlo a una pintura.
Complejo, con millones de significados, pero hermoso a la vez.

Era su más preciada obra de arte.

''Sett...'' Está preocupado, lo puede ver en su rostro, forzándose a hablar solo para captar su atención.

''Corazón, ¿qué te dije?'' 

''Estás llorando''

¿Lo está?  Se toca las mejillas, y puede sentir la humedad, como las gotas caían de sus ojos, ''¿Estás bien?'' Es Aphelios quien lo toma de la mejilla, y no puede hacer nada más que derretirse en el tacto y querer más, como un perro que requiere un poco de afecto y restriega su cabeza en la mano de su dueño.

Settrigh toma la mano de él en la suya, y se da cuenta, se da cuenta de que esto quiere para toda la vida, quiere estar al lado de Aphelios, ayudándolo, apoyándolo, y por sobre todo, amándolo, quiere sostener esas manos pálidas y delgadas en las suyas, acariciar y jugar con aquel estúpidamente negro cabello suyo, besar sus lunares, cada parte de él, toda la vida.

 ''Solo me di cuenta de algo''

''¿De qué?''

''Te amo'' No lo dice verbalmente, en realidad, hace la seña, apuntándose a sí mismo, dos puños cerrados y cruzados en su pecho, para luego apuntarlo,

A él.

Y éste sonríe con tanta alegría y tanto cariño, algo que nunca antes había sentido, porque Aphelios nunca sintió aquel amor romántico del que todos hablaban, nunca tuvo el tiempo, la mente, para aquello, pero aquí está.

Enamorado perdidamente de Settrigh, de su Sett.

Y no puede estar más feliz.

''Te amo también''