Capítulo 23

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Greg

- ¡eso! –Erik salto con los puños apretados, sonriendo de oreja a oreja.

Cualquiera que los viera pensaría que simplemente están haciendo tiros con alguna pelota o con las mismas piedras, pero en realidad Greg le había suplicado a Kendra que le enseñara un hechizo que le permitiera a su hermano usar su magia también, Kendra le dijo que na había tal cosa, pero si uno que podía encantar los objetos y él debía darles intención, se acercaba lo suficiente. Así que los últimos días apenas Greg salía de la escuela, Erik iba en su auto a traerlo con su dragón en la parte de atrás, aunque los últimos días se les había unido la más pequeña de sus hermanas, porque había descubierto al pequeño dragón que en pánico porque lo había sujeto demasiado fuerte la mordió en defensa propia.

- ¿Por qué no puedo jugar yo también? –Lucia tenía diez años, y aunque le habían contado todo y hubiera sido mordida, insistía en cargar al reptil y que la llevaran a donde ellos iban a ir, ese era el precio por su silencio.

-porque es algo inestable, ya te lo dije. –Lucia hizo un puchero mientras acariciaba la cabeza del reptil.

"Pareces disfrutarlo Asfrael"

mientras no me apreté estamos bien

Greg rio, captando la atención de sus hermanos.

-sigo pensando que lo que siento más raro de todo esto es que puedas hablar telepáticamente con Asfrael. –Greg solo se encogió de hombros, no había podido explicarlo, solo salía natural para ellos.

- ¿Por qué no puedo yo hablar con él? –ella miraba con atención al pequeño dragón que muy pronto sería más grande que su capacidad para cargarlo. –no es justo, yo también quiero un dragón.

-Lu, no son juguetes, Asfrael no se quedará así de pequeño mucho tiempo, e imagínate que si ahorita se come todas las ratas que pasan cerca de la casa. –Lu hizo una mueca de asco. –te imaginas lo que comerá después. –Greg era quien ahora hacia una mueca exagerada.

Como que no hubieras dicho que sabían bien.

Greg negó, recordando el pequeño incidente que su cabeza divago demasiado instalándose en Asfrael y experimento como se comía la rata, se había sentido tan real en él, que estando sentado en el comedor con su familia casi había salido corriendo.

"dije no tan mal, es distinto y eso no se vuelve a repetir y tal vez deberías dejar de comer ratas"

La carne que me das es insípida, las ratas aún están vivas, saben mucho mejor.

Asfrael miro a Greg detenidamente y luego bufo.

"lagartija malcriada"

Mira quien me ha criado.

Asfrael aun solo teniendo pocas semanas de existencia, tenía demasiado carácter y tal cual niño pequeño movió la cabeza de lado a lado como si estuviera burlándose de Greg... más que una relación de jinete y dragón, parecía de hermanos.

Siguieron jugando con las piedras cargadas de la magia de Greg lanzándolas a un blanco especifico, Greg estaba tan lleno de alegría, porque desde la muerte de su padre, había puesto una distancia con Erik, de la cual no había sido consiente hasta que ahora sentía que esa brecha desaparecía, irónicamente en el momento que eran más distintos.

-Greg. –Erik volteo a ver sobre su hombro asegurándose que Lu estuviera lo suficientemente entretenida con Asfrael. –sé que no hemos tenido una oportunidad de hablar al respecto. –Erik sostenía una de las piedras entre los dedos, podía sentir el flujo de energía que provenía de ella, comprendía que eso no era ni una fracción de lo que su hermanito podría ser capaz de hacer. - ¿Qué sucederá después? –sentía el nudo formarse en su garganta.

Los Jinetes De DragónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora