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Él es la personificación de un dios griego.
O eso dicen todas de Andrew Basset, el apuesto mariscal de campo, el chico que con una mirada hace que se te mojen las bragas, aunque es un gruñón, malhumorado e inquieto de primera, que va por la vi...
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Final
Estoy ansiosa.
Muy ansiosa, hoy es nuestra graduación, pero también es el día en dónde sabré si me aceptaron en Harvard, intento mantener mis dedos fuera de mi boca, muevo mis pies de manera nerviosa mientras respiro hondo, hoy hace un calor infernal en Florida, el pasillo está lleno de estudiantes, esperando a ser llamados para entrar al campus.
Phoenix viene corriendo hacia mí con dos Starbucks, todavía no he visto a Dakota, aunque puedo imaginarme en donde está, quizás anda en el cuarto de servicio besándose con Chanelle, Sídney aparece en mi campo de visión con un hermoso vestido, desde la última vez que la ayude a descubrir lo que Katherine le hizo, nos volvimos un poco unidas, aunque no somos amigas.
—Llego por quién lloraban.
—Me iba a dar un ataque si no llegabas.
De los nervios le arranco el café de las manos, aunque no debería de tomar cafeína, ya que me haría temblar más, pero tengo que entretenerme con algo, no he visto a Andrew hoy, eso también me tiene ansiosa, las últimas semanas fueron un total caos para los dos, ya que él junto al equipo de fútbol estaban aplicando para becas deportivas alrededor del país.
La escuela termino hace meses, no se pudo celebrar la graduación de una vez por culpa de un huracán que afecto a Florida, pero gracias a Dios no fue tan grave, aunque hubo pérdidas económicas, nadie murió qué es lo que importa, este atraso ayudo a que muchos se centrarán en aplicar a becas o para que decidieran que es lo que quieren hacer ahora que ya salimos de aquí.
Sídney se detiene delante de mí sacándome de mis pensamientos, trae una pequeña bolsa de regalo, me la pasa antes de sonreír, felicitarme por la última edición del periódico que sacamos, en dónde hice un recuento de los últimos años de todos, ella junto a varias personas más fueron la portada del periódico, quise devolverle un poco de lo que perdió por culpa de la broma aquella.
—Gracias por eso Elowyn, cuando sea grande quiero ser como tú.
Me hace reír a carcajada, le doy las gracias por el regalo, ella se encoge de hombros diciéndome que no pasa nada y se aleja, Phoenix me motiva abrir la bolsa, así que eso hago, me encuentro con un lindo brazalete de plata que viene acompañado de una cadena con un dije de una flor, es verdaderamente bonito, así que le pido a mi amigo que me ayude a ponérmelo.
—Es hermoso.
—Ella tiene buenos gustos.
Dakota aparece justo a tiempo con Chanelle, en ese momento sale la secretaria de la directora a decirnos que ya podemos ir al campus a sentarnos, miro por encima de mi hombro tratando de encontrar a Andrew, pero se me dificulta por el gentío, así que sigo caminando hacia la salida, escuchando como mis amigos hablan de lo que harán después de salir de aquí.
Miro mi teléfono esperando un mensaje de él u algo que me haga saber que está aquí, pero no hay ni una señal de él, no quiero sentirme mal, pero sé que lo que sucederá a continuación definirá nuestra relación, no sé si Andrew seguirá conmigo si me aceptan en Harvard, estaremos muy lejos, no sé si él vaya a querer una relación a distancia, trago con fuerza alejando esos pensamientos.
