Seductive Heart Extras

Mommy knows (Parte 2)

—¿Qué? —Louis se aparta—. ¿Qué es lo que acabas de decir?

Harry se gira hacia él, la expresión en el rostro de su alfa es todo un poema de reocupación y shock en estado puro.

—Que creo que estoy embarazado.

—"Creer" es una palabra que no deberías usar junto a "embarazo". —Se pasa una mano por su cabello castaño, en el que se alcanzan a distinguir unas cuantas canas—. No juegues así conmigo, Harry. ¿Estás o no estás embarazado?

—No lo sé. —Su voz sale temblorosa—. Pero hay una gran posibilidad de que lo esté. ¿Acaso no has notado mis síntomas? He estado sintiendo mareos, cansancio, mucho sueño y además he vomitado varias veces.

—Joder, sí que notado tus cambios de humor y tu cansancio pero... Mierda, un embarazo jamás cruzó por mi mente. —Sus ojos se agrandan, Harry casi puede ver el miedo en ellos—. Creí que solo era por los cambios de temperatura, bebé.

Harry se acerca más a él; necesita que sepa, que sienta que todo esto no era algo que él deseaba que llegara.

—Yo también lo creía así pero —se encoge de hombros—, los dos aún somos fértiles y mi celo acaba de pasar; y da la casualidad que mis síntomas comenzaron un par de días después de mi celo.

Louis suelta un gruñido de frustración, su frente se ha aperlado de una ligera capa de sudor y está en extremo nervioso, Harry lo puede sentir a través del lazo. Peor aún, siente su terror en cada poro de su ser.

Debe de estar imaginándose lo peor. Si Louis tomó una actitud tan negativa cuando le dijo que estaba embarazado de John ahora no quiere ni pensar en cómo es que se pondrá si su temor resulta siendo real.

—No puedo hacer esto, Harry. —Le dice con convicción—. Tengo cincuenta y ocho años. Esto... simplemente no creo poder hacerlo.

—¿Y crees que yo estoy listo? —le pregunta con los ojos vidriosos—. Tampoco es que esté en el mejor momento, Louis. Ya no soy joven. Y si antes me sentía aterrado ahora imagínate como me siento.

Tras un breve momento de silencio. El alfa toma una gran bocanada de aire.

—¿Ya te hiciste la prueba?

—No. Pero tengo una cita con mi doctora a las cinco de esta tarde. Es mejor saberlo antes de que lleguen los gemelos.

Louis resopla, parece que aun esta malhumorado. Harry no podría sentirse peor, suelta unas cuántas lágrimas y solloza, está temeroso a que su alfa se moleste de verdad y ni siquiera se apiade a acompañarlo a la cita médica.

La tensión en el aire es palpable. El omega se encoge cuando al alfa lo toma de los hombros.

—Omega, ¿qué es lo que tú quieres? —le pregunta y acaricia sus mejillas—. Sé que aun no sabemos nada con certeza pero, en caso de estar embarazado... ¿qué es lo que tú querrías hacer?

La pregunta lo toma un poco de sorpresa; Harry había pensado en ello, sí, pero honestamente esperaba que Louis le indicara el camino a seguir. No en cuanto a su decisión, pero sí a que él diera su redundante opinión primero.

El omega cierra los ojos por un instante, sabe qué es lo que quiere, pero decírselo a su alfa no es tan fácil como pensaba que sería.

—¿Tú? —indaga, tratando de mediar las aguas. Louis entrecierra los ojos.

—Yo hice la pregunta primero, omega tramposo. —Le sonríe—. Pero ya que insistes, te lo diré. Yo quiero lo que tú quieras. No voy a mentirte, ser padre a mi edad me aterra como la mierda porque el miedo a no poder estar siempre con mi cachorro estará presente desde que ese bebé nazca. —Agarra un rizo de su frente y lo acomoda hacia atrás—. Pero sí tú quieres tenerlo entonces... yo también lo querré y te apoyaré como lo hice en los embarazos pasados.