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¿Cómo es que las cosas salieron tan mal tan rápido?

Éramos dieciséis universitarios que salíamos a tener una pequeña aventura en las montañas. Ahora faltaba uno de nosotros y, si tenía suerte, nadie lo encontraría.

Chimón, Oab, Arm, Dew, Neo y Jane estaban buscando al bastardo. Nani y Sing se quedaron atrás con el resto de las chicas en caso de que Luke regresara.

Namtan estaba acostada a mi lado en mi cama. Janhae había subido y tomado muestras de todo lo que la policía pudiera necesitar para condenar a Luke y que Nam finalmente pudiera darse un baño.

Todavía no se sentía limpia, pero frotarse la piel y cambiarse de ropa le ofrecía un pequeño nivel de comodidad. Ella se negó a hablar sobre lo que pasó, y me sentí egoístamente aliviado. Sin embargo, si ella decidía que quería hablar, la escucharía.

Eventualmente admitió que solo quería estar sola, así que bajé para ver qué estaban haciendo los demás.

-No entiendo por qué estamos sentados aquí-, se quejó samy. -Él la folló. No le rompió las piernas-

Todos se quedaron en silencio.

¿Cómo puede alguien ser tan frío?

Janhae espetó y le dió una cachetada en la mejilla, girándole la cabeza hacia un lado. -¡Perra de corazón frío!- Janhae gritó.

Sing corrió y la agarró de los brazos, tirando de ella hacia atrás antes de que pudiera golpearla de nuevo. Sabía que esto también era duro para Janhae. Ella había sido la única en ver todo lo que Luke le había hecho a Namtan.

Samy gruñó y salió furiosa de la sala. Nadie fué tras ella.

Me senté con las otras chicas en la mesa del comedor. Prim encontró algo de cereal en la cocina, asi que lo comimos seco.

-He estado pensando-, dijo Tu. Todos la miramos incrédulos. Ella frunció el ceño, pero continuó -Hago eso de vez en cuando, ¿saben? De todos modos, estamos en las vacaciones de primavera. Algo terrible sucedió, pero no podemos dejar que arruine todo nuestro viaje. Les propongo algo loco... vayamos corriendo desnudas por el bosque... ¿Quién se anima?-

-Estoy dispuesta a hacerlo- se encogió de hombros Prim.

-¡Yo también!- Love sonrió.

Sabía que esto era una mala idea. Correr desnudo por el bosque cuando no teníamos idea de quién o qué podía estar ahí afuera era simplemente estúpido en muchos niveles.

Era algo que los chicos como yo no hacíamos. -Bueno.- Juro que todos me miraron como si tuviera dos cabezas o algo así.

-¿En serio Gunnie?- preguntó Prim.

-¿Vamos a ir o no?- respondí. Necesitaba hacerlo antes de que perdiera los nervios.

-¡Hurra!- Tu gritó saltó. -Solo trata de no chocarte con ninguna rama de roble venenoso. Confía en mí, es un infierno- Se quitó la camisa por la cabeza y la dejó caer al suelo antes de reírse y salir corriendo.

Love y Prim siguieron su ejemplo.

¿En qué me he metido? Me desnudé hasta quedarme en boxers, pero iba a alejarme de la cabaña antes de quitarme nada más.

La Casa de Muñecas •Off-Gun•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora