𝐒𝐂𝐑𝐄𝐀𝐌 | 𝐋𝐢𝐥𝐲 𝐑𝐢𝐥𝐞𝐲

2. 𝐏á𝐧𝐢𝐜𝐨

No había dormido ni un minuto de la noche así que apenas vi que era hora de arreglarme me levanté y fui a bañarme para después cambiarme e ir a desayunar, tenía unas ojeras terribles, mi cabeza estaba por estallar del dolor y mis ojos seguían rojos por las lágrimas de anoche.

-Wow y esa cara de pocos amigos?- preguntó Tatum, como no iba a estar radiante si ella se fue a dormir a las 11 de la noche.

-Ni siquiera preguntes- respondí con un bostezo.

Había un poco de sangre en el piso derramada del cuchillo de aquella  persona misteriosa de anoche, tan solo la limpie y volví a mis asuntos, asuntos que incluían tomar mucho, pero mucho café.
Dewey entró a la cocina, anoche estuvo de guardia en la comisaría por lo que no llegó a dormir.

-Buenos días- dijo con la misma voz cansada que yo.

-No tienen nada de buenos querido hermanito- sonreí con los ojos casi cerrados.

-Son las 8 de la mañana como puedes estar tan dormida? Ya es tarde - respondió.

-Tarde para las personas que durmieron al menos una hora, no como yo que no dormí ni un segundo- respondí sarcástica elevando una ceja.

-Se podría saber porque no dormiste?- preguntó Tatum.

-Insomnio - replique.

Claramente no iba a decirles que ayer el asesino de Casey Becker y Steve Orth había estado atormentandome por teléfono y después entro a nuestra casa, la que nos parecía tan segura antes de esto incluso para Dewey y Riley aún  significaba seguridad, pero al ver como ese psicópata entro tan fácilmente a nuestra cocina y luego salió sin problema aparente, para mí ya no era seguro, era tan solo otro lugar del pueblo en el que no podía dejar de estar alerta.

-Mjm - Tatum me dio la razón pero aún con un poco de desconfianza.

-Necesitamos irnos ya o llegaremos tarde Tatum - Cambie de tema.

-Yo las llevo - sentenció Dewey.

Subimos a la camioneta de sheriff de Dewey y nos dirigimos a otro infierno lleno de reporteros atormentandonos.

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-Hola chicas, como estuvieron anoche?- preguntó Sidney con curiosidad.

- Bien, tan solo vi de nuevo la misma película de terror de cada semana - expresó.

-¿Y tú Lily?-.

- Me quedé dormida temprano - explique sin mucho más que decir, nadie sabría sobre los acontecimientos de anoche.

Tatum me miró mal por haber mentido pero no le pensaba decir a Sidney que no había dormido o haría demasiadas preguntas.

-Hola hola a mis chicas favoritas - saludó Stu.

-Hola- saludó Billy

-Hola- respondí fríamente.

No quería ser descortés pero no tenía muchos ánimos.

Tatum claramente se acercó a darle un tierno y rápido beso bien correspondido.

Tocó la campana escolar y tuvimos que  entrar a clase, lamentablemente para Tatum se tuvo que separar de Stu ya que el tenía química y a nosotras nos tocaba matemáticas, esa materia era todo lo que me aburría en esta vida, la odiaba, no entendía nada, lo único que medianamente entendía eran las fórmulas pero de ahí en fuera entendía lo mínimo que se podía saber para pasar año.

Me senté entre Sid y Tate y la clase transcurrió normalmente aunque yo estaba quedandome dormida en medio de la explicación de la profesora.
Cuando tocó la campana de cambio de clase todos salimos casi corriendo, la clase que seguía era mi favorita, Artes, donde nos dejaban pintar lo que quisieramos para plasmar nuestros sentimientos en un cuadro, ese día tenía tantas cosas en mente pero ninguna salía a relucir para la clase, me quedé totalmente en blanco sin saber que pintar, al final me decidí por un paisaje  memorable de Woodsboro.
Pinte la mitad y dejé lo restante para terminarlo a la próxima.

Fui la baño y comencé a escuchar unos ruidos extraños, me fijé por todos lados pero no había nadie, pero cuando miré el espejo estaba escrito con sangre "No bajes la guardia" Corrí asustada para salir del baño y apenas salí me encontré a Sidney, me preguntó si estaba bien y porque estaba tan asustada, tan solo pude girar a ver hacia el baño, no podía articular ninguna sílaba, mi garganta tenía un nudo que no quería desaparecer que no me dejaba hablar, Sidney al ver el rumbo de mi mirada entró al baño y se quedó horrorizada, aunque lo único que hizo fue mojar unas servilletas y limpiar el espejo, no queríamos más problemas de reporteros en esta escuela.

-Tranquila Lil, todo estará bien - me tranquilizó y me abrazó haciéndome sentir segura.

-¿Porque a mí Sid? - pregunté llorando.

-No lo se Lil, ¿Porque a mí madre?¿Porque a Casey?¿Porque Steve? no hay una respuesta a eso, simplemente pasa- explicó.

-No debería solo "pasar" Sid- contesté tratando de buscar una explicación a todo.

-No, no debería solo "pasar" Lily - me dio la razón tranquilizandome.

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