Mi Odioso Amante

Capítulo 3: Aquella chispa

Por alguna razón, en este tiempo que eh estado con ese chico, con ese usuario desconocido me eh encariñado, en este poco tiempo que nos llevamos conociendo siento un cariño que va creciendo hacía él, aunque a veces me llegue a insultar. Insultos que nadie antes me ha dicho y que me emocionan cada vez que me lo dicen... Cuando jugamos ese juego de combate al matarme y reírse de mi me hacen sentir extraño. Una sensación tan extraña pero dolorosa, que va haciendo mis mejillas arder... Demasiado divertido, es algo que eh notado de él, no hay ni un día que no me haga reír con cada cosa que me dice. Pero a veces me llega a hacer sentir miserable conmigo mismo. (Suspiro) me debo concentrar más en este juego que estar divagando en mis pensamientos. Veo el escenario que se me presenta, me está matando de nuevo, se está haciendo una gran costumbre en este juego. Creo que no tengo nada de que quejarme de nada, de todas formas, soy como un novato en este juego. Aunque no quiera admitirlo. -- ¿Qué pasa? ¿Vas a llorar? -- Me lo decía de una forma descarada. Se podía notar en mi expresión y forma de jugar que me estaba desesperando, no quería admitirlo... Pero ya se dio cuenta. Quisiera hacerle pelea, para que vea que soy lo suficiente como para poder matarlo y reírme en su cara. Pero por lo pronto no sucederá.

Mi personaje estaba justo enfrente de él, estos dos parecían que se estaban viendo, preparándose para cualquier ataque sorpresa que pudiera hacer el otro, o, tal vez uno que fuera directamente advertido. No importaba cual fuera, hay una alta posibilidad de que me gane o de que yo le gane. No importa cuál de las opciones sea el resultado, quiero hacer una buena batalla. Una que me haga ver que soy lo suficientemente bueno para hacerlo sudar, o puede que no lograse ese objetivo, pero quiero hacer que me vea como el tipo de chico que progresa de forma rápida.

-- Perdón por esto, pero me tengo que ir, supongo que otro día te podré matar de la forma más hermosa -- 

¿En serio? Como podía decir eso cuando ya estaba decidido a mejorar y dar todo en este juego de vida y muerte, realmente no me esperaba ese mensaje, pero no podía hacer nada por el momento. -- Esta bien, pero para la otra yo seré el que te mate de la forma más despiadada --

--Lo dudo -- Fue lo último que dijo antes de salirse del juego. Yo usualmente cuando él se salía del juego también me salía, odiaba estar en ese juego y dejar que otros me humillaran, pero ahora voy a practicar para así poder matarlo, no, es demasiado pronto esperar poder matarlo. Es mucho más nivel que yo. Entonces entrenaré para hacer una batalla épica.

Pase aproximadamente cuatro horas jugando aquel juego, sentía mayor progreso. Llegue a ser sexto lugar, eso era bueno entre 25 personas. Aunque no me agradaba demasiado la idea de tener más muertes que victorias, pero es una forma de progreso. Me salí de aquel juego cuando me sentía realmente más cansado. Además, que ya casi era la hora de cenar. Antes de salirme completamente del juego, fui a nuestro chat privado, casi nunca hablábamos por ahí. Una vez solamente intercambiamos tres palabras y eso que me dejo en visto. Dudo demasiado que vaya a leer este mensaje, pero tengo esa enorme necesidad de ponerle esas palabras -- te quiero --