El luchador y la pelirroja, dos mundos opuestos

Capítulo 2: El submundo de fiore

Erza quedó atónita ante sus palabras — ¿Un mago del submundo?

Natsu asintió con la cabeza algo avergonzado — Si... lo soy. Pero antes de que digas nada, déjame explicarme.

En otras circunstancias Erza habría salido corriendo o estaría furiosa, pero en lugar de eso simplemente estaba confundida. Tenía intriga por la historia de Natsu, más que en cualquier otro momento de su vida — Está bien, dime.

Natsu suspiró y empezó con la explicación — Como sabrás, el submundo tiene reyes que se eligen mediante torneos. Bueno, el actual rey, Acnologia, llegó al poder después de destronar al antiguo rey Igneel. Luego de destronarlo, lo exilió a él y a todos sus seguidores... entre ellos a mis padres, que estaban esperando un hijo, a mi. Nací en Magnolia, apartado del submundo. Viví durante dos años con mis padres, pero... murieron por una enfermedad, los dos. Luego de eso, Igneel Dragneel me adoptó y me crió como a su hijo. Desde ese entonces, he aprendido y entrenado en mi magia Dragon Slayer de Fuego para poder derrotar a Acnologia y hacer justicia.

Erza quedó fuertemente sorprendida por la historia de Natsu, no era para nada lo que ella esperaba. Luego de pensar unos segundos, dijo — Entonces... todos estos años... la razón de tu actitud... ¿es porque buscas venganza?

Natsu frunció el ceño — No es venganza, es justicia. Acnologia exilió injustamente a miles de personas del submundo y durante años sus seguidores han hecho de todo. Robar, saquear, matar y abusar tanto de las personas normales como de los magos. Es un tirano al que yo voy a derrotar.

La pelirroja lo miró escéptica — ¿Y cómo sabes que serás tú quien lo derrote?

— Porque yo no descansaré hasta verlo muerto. Además, no estoy solo. Gray y otras personas que me van a ayudar. — Afirmó.

— Vale, pero. ¿Cuando llegues al poder, qué se supone que harás? — Cuestionó la chica.

— ¡Arreglaré las cosas y limpiaré la imagen del submundo para que la gente deje de odiar la magia! — Declaró Natsu motivado.

Erza lo miró enojada — El submundo se ha ganado a pulso ese odio.

— ¿Qué dices? — Dijo Natsu molesto — Las acciones de unos pocos magos no nos representan a todos. Acnologia no nos representa, por eso acabaremos con él.

Erza lo miró fijamente, bastante reflexiva. Ella suspiró y dijo — Está bien... tu haz lo que quieras, a mi ni me afecta.

— ¿No se lo dirás a nadie, cierto? — Le preguntó Natsu preocupado.

Ella negó con la cabeza — Por supuesto que no, no gano nada con decirlo. Pero te advierto, si involucras a mi familia o a la escuela con esa venganza tuya, le contaré todo a las autoridades y me aseguraré de que pagues. ¿Entendido? — Exclamó Erza con voz intimidante.

Natsu se asustó al verla así — S-si, entendido...

— Bien. — Ella se dio la vuelta — Ahora me voy. — Erza salió del cuarto y rápidamente también se fue de la casa.

Mientras ella caminaba de regreso a su casa, seguía procesando toda la enorme cantidad de información que le había dado Natsu. Jamás creyó que el chico sería un mago, ni mucho menos el discípulo del rey. No estaba enojada, no estaba decepcionada, simplemente estaba sorprendida. Pero extrañamente... todo le cuadraba. La actitud de Natsu y Gray, su aislamiento, ahora todo tenía sentido.

— Será mejor no acercarme a él... — Pensaba ella mientras se alejaba — Podría traerme problemas...

En cambio, solo en su habitación, el chico puso su cara sobre sus manos, frustrado — No puede ser... ¿Por qué ella tenía que seguirme? Ahora todo está arruinado... debo informarle a los demás, debemos controlar esta situación.